Editorial Alaire

Hoy los trenes amainan su equilibrio,
imploran la fe
dejando al descubierto desalientos sin nombre,
un túnel que no lleva luz y oscurece los rostros.

Son los miedos que habitan cavernas de futuro
desde un presente que al mundo rasgó sus esperanzas

Recuerdo cuando los espejos eran
nenúfares de júbilo
y uníamos las horas a la hoguera del camino
-rodeados de cándidos presagios-
sin más aroma que la ilusión de vivir.

Era extraño el temor que hoy percute en las sienes
donde un lupus combate al trigo
alarmando la espiga, haciendo riesgo del granero
porque los abandonos granan el horizonte
y el esfuerzo es mayor que la moral.

Queremos alejarnos de manantiales grises
que insisten en llevarnos a cauces sin consuelo,
que nos vierten a un mar moribundo,
donde la sal no avala la vida.

Queremos alcanzar renovadas colmenas
para endulzar miradas al futuro,
hallar un pozo donde holgar los miedos
recuperando el nombre y un lugar en la tierra.

Ayer mirábamos al futuro con tranquilidad y hoy apenas si nos atrevemos a levantar los ojos del suelo. Un buen poema que refleja la incertidumbre que vivimos. Un abrazo.
Soledad

[quote="Pilar Morte"]

Hoy los trenes amainan su equilibrio,
imploran la fe
dejando al descubierto desalientos sin nombre,
un túnel que no lleva luz y oscurece los rostros.



Hermoso versos, Pilar.
Todos queremos huir de nuestros miedos e inseguridades, ahora más cercanas por el momento que nos agobia.
Siempre me identifico con tus poemas y es un placer leerte.
Abrazos.

Hermoso poema que me ha gustado leer, querida amiga Pilar. En la línea de tus últimos trabajos, reflexionas sobre las cosas que suceden en un ecosistema inconsistente (lo uno lleva a lo otro).

Ay, el nombre. Es un dato inexorable, nunca miente, sean quienes sean los nombrados, siempre es igual de inexorable.

Y los trenes. No pueden vivir de la fe, descarrilarían; tienen que tener raíles y, desde luego, un rumbo prefijado.
Lo que pasa es que los raíles se gastan, los trenes envejecen, el hierro se oxida, las ruedas no bailan, los túneles advierten, los vagones se cansan, y los miedos, los miedos no existen porque se sabe que en el andén de la vida siempre les aguarda el premio por el trabajo silente, abnegado, labor diaria que nombra a los trenes que han recorrido las vías aunque llueva, truene o haga un sol de justicia y, además, sin cobrar pasaje. Imagínate un tren gratuito en el que vas y vienes.

Jolines, nunca he tenido yo esa suerte. Pero ya se sabe, unos nacen para locomotora y otros nacen para vagones y vagones de cola. Los vagones se dejan llevar, pero se rebelan contra sí mismos porque si la locomotora pierde fuelle ellos están locos por detenerse. Ay, los vagones, nunca pensaron que las locomotoras necesitan carburante y, además, cuesta dinero, esfuerzo, mucha energía y tal y tal.

En fin, colega, las cosas de los trenes no creo que sean preocupantes, los trenes van y vienen hasta el día que dejan de venir; ese día señalará que hemos concluido el trasiego. Tiene que llegar. Todo llega. Tan inevitable es llegar, como inexorables los nombres. Por otro lado, esperemos que la locomotora no se canse, por lo menos por ahora, aunque eso quizá sí sería motivo de preocupación, o quizá no lo sería, con los vagones nunca se sabe...

Ha sido un placer leerte. Felicidades por el poema y por ser como eres.
Un fuerte abrazo

Cuando niños no se ven las dificultades ni se asusta uno por los temores imaginarios,
pero cuando se crece, el futuro se vuelve gris y temeroso y nos exigimos que el suele que pisamos no amenace terremoto. Al final suavizas la esperanza

Me gustó tu poema en el que dejas tu sensibilidad poética y tu arte.

Un abrazo

Guillermo

Genial poema, Pilar.

Cada día tu poesía crece y crece más y más.

Me ha encantado eso de recuperar un nombre y un lugar en la tierra.

Un abrazo
y Mi Enhorabuena
Ana

Hola Pilar.
Acertadas metáforas e imágenes para plasmar una actualidad que nos golpea desde todos los rincones posibles. Me gustó. Abrazos.
Mario.

Un gusto leer este poema en fondo y forma bellos , Pilar.
Un saludo.

Excelente esta reflexión poética Pilar. La añoranza de referentes estables como pretexto. Un beso.

Siempre es un placer leer tu poesía serena y metidada. Abrazos.

Pilar Morte escribió:Hoy los trenes amainan su equilibrio,
imploran la fe
dejando al descubierto desalientos sin nombre,
un túnel que no lleva luz y oscurece los rostros.

Son los miedos que habitan cavernas de futuro
desde un presente que al mundo rasgó sus esperanzas

Recuerdo cuando los espejos eran
nenúfares de júbilo
y uníamos las horas a la hoguera del camino
-rodeados de cándidos presagios-
sin más aroma que la ilusión de vivir.

Era extraño el temor que hoy percute en las sienes
donde un lupus combate al trigo
alarmando la espiga, haciendo riesgo del granero
porque los abandonos granan el horizonte
y el esfuerzo es mayor que la moral.

Queremos alejarnos de manantiales grises
que insisten en llevarnos a cauces sin consuelo,
que nos vierten a un mar moribundo,
donde la sal no avala la vida.

Queremos alcanzar renovadas colmenas
para endulzar miradas al futuro,
hallar un pozo donde holgar los miedos
recuperando el nombre y un lugar en la tierra.

Tu poesía siempre es abarcadora en contenido y forma.
Te leo con detenimiento. Hay un llamado general que agradezco.

abrazos Pilar

lázaro.

He disfrutado mucho la lectura de este poema Pilar.

Un abrazo.

Pilar, me ha gustado mucho tu poema, sobre todo porque yo, que soy un admirador de la poesìa metafòrica , agradezco cuando èsta tiene esos destellos que hacen muy agradable la lectura.

Un saludo afectivo

Josè Manuel Acosta.

MarRevuelta escribió:Ayer mirábamos al futuro con tranquilidad y hoy apenas si nos atrevemos a levantar los ojos del suelo. Un buen poema que refleja la incertidumbre que vivimos. Un abrazo.
Soledad

Sí, el poema ha nacido desde tanta incertidumbre y dolor. Gracias por tus amables palabras
Abrazos
Pilar

Marisa Peral escribió:

Pilar Morte escribió:
Hoy los trenes amainan su equilibrio,
imploran la fe
dejando al descubierto desalientos sin nombre,
un túnel que no lleva luz y oscurece los rostros.



Hermoso versos, Pilar.
Todos queremos huir de nuestros miedos e inseguridades, ahora más cercanas por el momento que nos agobia.
Siempre me identifico con tus poemas y es un placer leerte.
Abrazos.

El placer es mío de que te lleguen mis versos. Gracias por decírmelo
Abrazos
Pilar