Editorial Alaire

Vaya, vaya ¡ qué sorpresa tan agradable!
Nos dejas un soneto precioso, de esos que gusta leer y recrearse en sus versos. Me ha gustado y lo he disfrutado.
Abrazos
Pilar

Te montaste en un magnífico soneto para ir de viaje. Condujiste los alejandrinos
a la medida exacta de tu sentimiento aunque llegues al cierre un tanto desconcertada,
pero sólo metafóricamente hablando.

Un abrazo

Guillermo

Precioso soneto Pascua, siempre me ha parecido muy difícil ajustarse a unas medidas, por lo que me causa admiración doble.

Un abrazo.

Pascua Lira. escribió:Al alba me despierto. Paso el jardín de prisa;
el alto césped cruje; con su frío lamento
miro al astro lejano que rueda al norte lento,
plateando el lomo calmo de la espuma sin brisa.

Sobre cristal de hielo voy viajando imprecisa.
Detrás dejo la noche y hacia el Este descuento
los minutos que pasan, mientras el mar violento
de esta costa salvaje, mi sentir improvisa.

El día se amontona. El sol que nace muestra
la melena rizada en el espacio abierto
y su perfil agranda el espejo que ofrece.

Rauda desciendo al mar y una mezcla siniestra
de voces me rodea; veo con desconcierto
en el azul, sin goce, mil ojos ….. envilece.

Pascua, he visto cada paisaje y he sentido cada sonido en tu voz. Me encantò leerte, saludos! Luna.-

Pilar Morte escribió:Vaya, vaya ¡ qué sorpresa tan agradable!
Nos dejas un soneto precioso, de esos que gusta leer y recrearse en sus versos. Me ha gustado y lo he disfrutado.
Abrazos
Pilar

Gracias Pilar por tu comentario.

Un abrazo

Pascua Lira. escribió:Al alba me despierto. Paso el jardín de prisa;
el alto césped cruje; con su frío lamento
miro al astro lejano que rueda al norte lento,
plateando el lomo calmo de la espuma sin brisa.

Sobre cristal de hielo voy viajando imprecisa.
Detrás dejo la noche y hacia el Este descuento
los minutos que pasan, mientras el mar violento
de esta costa salvaje, mi sentir improvisa.

El día se amontona. El sol que nace muestra
la melena rizada en el espacio abierto
y su perfil agranda el espejo que ofrece.

Rauda desciendo al mar y una mezcla siniestra
de voces me rodea; veo con desconcierto
en el azul, sin goce, mil ojos ….. envilece.

Es un viaje dulce y tormentoso, real. Sin embargo hay mucho de inverosimil en las cosas mas reales de nuestra percepcion existencial. Que no envilezca nunca tu bello corazon. Un abrazo feliz,

ERA

Pascua, un hermoso poema, me ha encantado el ritmo que le das a los versos.
Saludos.

Un gran soneto, querida Pascua, en el difícil arte del alejandrino y con unos bien desarrollados encabalgamientos. Logras imprimir el ritmo del viaje, de su comienzo, transcurso y magnífico desenlace en los tercetos; el último me parece buenísimo:

Rauda desciendo al mar y una mezcla siniestra
de voces me rodea; veo con desconcierto
en el azul, sin goce, mil ojos ….. envilece.

como debe de ser en un soneto que se precie.

Bicos

Hermoso soneto, amiga Pascua, en el que los versos alejandrinos aparecen bien estructurados.
El mar podría ser una alegoría de las aguas humanas. El viaje quizá una gran metáfora del transitar en la vida.
Ha sido un placer leerte. Felicidades por el hermoso soneto.
Un cordial abrazo.

Felicidades, y una felicidad poder transitar por este trabajo de métrica, Pascua.
Salud.

Un soneto en magníficos alejandrinos, de los que se disfrutan leyendo. Un placer grande venir.
Un abrazo.
Pepa

Pascua Lira. escribió:Al alba me despierto. Paso el jardín de prisa;
el alto césped cruje; en su frío lamento
miro al astro lejano que rueda al norte lento,
plateando el lomo calmo de la espuma sin brisa.

Sobre cristal de hielo voy viajando imprecisa.
Detrás dejo la noche; hacia el Este descuento
los minutos que pasan, mientras el mar violento
de esta costa salvaje, mi sentir improvisa.

El día se amontona. El sol que nace muestra
la melena rizada en el semblante lacio
y su perfil agranda el espejo que ofrece.

Rauda desciendo al mar y una mezcla siniestra
de voces me rodea, y veo, muy despacio,
en el azul, sin goce, mil ojos ….. envilece.

Bonito despertar, como repica tu nombre.
Suena preciosa el alba que así describes, Alba
suena a rumores
de mar en calma

Víctor

Arriba también este sonetazo!!!

He visto el paisaje que nos describes en tu bello poema.
Felicidades Pascua
Maria