Editorial Alaire

Para Ara López y A.Satir - Por la similitud en el título

La Casa Abandonada

Yo vengo a abrir las ventanas de la casa abandonada
y tu nombre cede a los deslices como un torbellino alienado.

Mi voz, que se estrella contra una lápida,
imita el abordaje de los albatros contra el faro.

Ceremoniosa y desconfiada salgo de mi clausura,
asciendo por las escaleras corroídas por el rigor de los inviernos
y descubro agradecida el espectáculo de un diáfano horizonte.

Los álamos y los sauces crecen lejos
arriesgándose en el reino de los almarjales
entre las nieblas lánguidas que surgen al caer la noche.

Son las marismas del agua recién llovida
las que aquietan los murmullos alucinados
que se extienden por las estancias
y predicen las serenas cadencias del alba,
las que nos traen las horas cuando, entre suspiros,
los dos nos habitamos con nuestro silencio enamorado.
---

© MAR – San Valentín 2012

He seguido tu viaje, estancia y horizonte en el recuerdo y en el amor que permanece. Me gustó seguir estos versos
Abrazos
Pilar

Un final de amor tras unos versos finamente literarios y dulces.

Un abrazo


Guillermo

Como Luis Rosales encendía cada estancia de su casa con sus recuerdos, tú, abres las ventanas para dejar entrar una bocanada de amor. me ha gustado mucho Marisa, un fuerte abrazo.

Pilar Morte escribió:He seguido tu viaje, estancia y horizonte en el recuerdo y en el amor que permanece. Me gustó seguir estos versos
Abrazos
Pilar

Tú, casi siempre la primera, Pilar.
Un gusto que te agraden estos viajes
Gracias y un abrazo.

Guillermo Cuesta escribió:Un final de amor tras unos versos finamente literarios y dulces.

Un abrazo


Guillermo

Gracias Guillermo, por tus halagos.
Un abrazo.

Isabel Moncayo escribió:Como Luis Rosales encendía cada estancia de su casa con sus recuerdos, tú, abres las ventanas para dejar entrar una bocanada de amor. me ha gustado mucho Marisa, un fuerte abrazo.

Las ventanas siempre hay que abrirlas, Isabel, unas veces para dejar entrar el aire fresco, o una bocanada de amor, que nunca viene mal y otras para que salgan los malos pensamientos.
Me alegro si te ha gustado, gracias y un abrazo.

Que de luz entra por esas ventanas y que de versos hermosos ilumina. Un placer andar las habitaciones de tus recuerdos.
Un abrazo.
Pepa

Bravo, Marisa:
Me ha encantado el estilo y ritmo de tu poema.
Un abrazote:
Arturo

La poesía llena de metáforas es mi gran aliada, versos llenos de matices que dejan entrever la calidad y filosofía del-la poeta_poetisa

un cordial saludo

José Manuel Acosta.

Josefa A. Sánchez escribió:Que de luz entra por esas ventanas y que de versos hermosos ilumina. Un placer andar las habitaciones de tus recuerdos.
Un abrazo.
Pepa

Gracias Pepa, tú eres una de las que siempre se asoma a mis ventanas y me encanta que lo hagas.
Contenta si te ha gustado lo que ves.
Un abrazo.

Arturo Juárez Muñoz escribió:Bravo, Marisa:
Me ha encantado el estilo y ritmo de tu poema.
Un abrazote:
Arturo

Tú sabes, Arturo, que conseguir estilo y ritmo no es nada fácil y si a tí te parece que lo he conseguido en este poema me alegro mucho y te doy las gracias por tus palabras.
Otro abrazote para ti.

José Manuel Acosta escribió:La poesía llena de metáforas es mi gran aliada, versos llenos de matices que dejan entrever la calidad y filosofía del-la poeta_poetisa

un cordial saludo

José Manuel Acosta.

Esta es otra de las cosas complicadas para los poetas, encontrar aliados que vean metáforas, matices, calidad y filosofía en los versos de otros colegas.
Por eso, José Manuel, te agradezco tanto tus palabras, es un placer recibir elogios como el tuyo.
Bienvenido, sevillano, y un saludo.

Marisa Peral escribió:Yo vengo a abrir las ventanas de la casa abandonada
y tu nombre cede a los deslices como un torbellino alienado.

Mi voz, que se estrella contra una lápida,
imita el abordaje de los albatros contra el faro.

Ceremoniosa y desconfiada salgo de mi clausura,
asciendo por las escaleras corroídas por el rigor de los inviernos
y descubro agradecida el espectáculo de un diáfano horizonte.

Los álamos y los sauces crecen lejos
arriesgándose en el reino de los almarjales
entre las nieblas lánguidas que surgen al caer la noche.

Son las marismas del agua recién llovida
las que aquietan los murmullos alucinados
que se extienden por las estancias
y predicen las serenas cadencias del alba,
las que nos traen las horas cuando, entre suspiros,
los dos nos habitamos con nuestro silencio enamorado.
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© MAR – San Valentín 2012

Que gran poema Marisa, "el habitante" de esa casa abandonada sale a la vida, a un nuevo amanecer. Un gran placer leerte.

Abrazos,
ERA

E. R. Aristy escribió:

Que gran poema Marisa, "el habitante" de esa casa abandonada sale a la vida, a un nuevo amanecer. Un gran placer leerte.

Abrazos,
ERA

Gracias Roxane, por tus palabras siempre alentadoras y amables.

Tengo pendiente de lectura un relato tuyo que hay en el otro foro y que está publicado por capítulos...
A veces entramos tan deprisa que no nos da tiempo a todo y la poesía es mayoría y nuestra debilidad.

Un beso.