Junto a la soledad del rompeolas

[M. Sánchez]

Pilar, una vez más, gracias.
un fuerte abrazo

[M. Sánchez]

Guillermo , gracias por tu reiteración.
Un fuerte abrazo

[M. Sánchez]

Javier, mi agradecimiento y mi abrazo, amigo

[Marisa Peral]

Hemos cruzado juntos muchos duelos,
y aprender a caer no es solo una postura
de los años o las extremidades
No
Ni tampoco la forma
que toman los teléfonos
cuando una voz huida te deja de escuchar

Es sorprendente estar y verte lejos,
deshabitado,
como cuencas de ojos perdidos en la infancia

A este cielo de ahora subsumido
que adorna entre el secreto de los arboles,
locuaz como las sombras,
le pertenece el dios de las mañanas
y un paseo en silencio por Le Bois de Boulogne

Y ese día de pie, que aún frena nuestro avance,
donde olvidó la vida, para siempre,
su pañuelo de seda natural
junto a la soledad del rompeolas,
hoy nos muestra sus verjas inmortales

En una luz cualquiera de la proximidad,
después de haber andado de norte a sur los mapas
y comprender que el mundo
te pasa tibiamente
a menos de una hora de distancia,
se puede oír la letra
de una vieja canción que recordamos

Hola Manuel, yo llego tarde por falta de tiempo porque he leído tu poema varias veces y otras varias me han interrumpido sin poder decirte cuánto me ha gustado.
Ahora me alegro porque lo he podido hacer más tranquila y porque, además, tengo que felicitarte por todas las veces que lo he disfrutado y por el reconocidísimo merecimiento.
Es un poema que traspasa y nos identifica por muchas razones. Por la cercanía de la jubilación y por la admiración por una ciudad como París.
Un abrazo.

[M. Sánchez]

Marisa, ¡ por dios! no pasa nada, no creo que sea necesaria la felicitación, lo importante es la lectura, y coincidir con la sensibilidad. Te doy las gracias por tu atención y por tu amabilidad.
Un fuerte abrazo

[E. R. Aristy]

Hemos cruzado juntos muchos duelos,
y aprender a caer no es solo una postura
de los años o las extremidades
No
Ni tampoco la forma
que toman los teléfonos
cuando una voz huida te deja de escuchar

Es sorprendente estar y verte lejos,
deshabitado,
como cuencas de ojos perdidos en la infancia

A este cielo de ahora subsumido
que adorna entre el secreto de los arboles,
locuaz como las sombras,
le pertenece el dios de las mañanas
y un paseo en silencio por Le Bois de Boulogne

Y ese día de pie, que aún frena nuestro avance,
donde olvidó la vida, para siempre,
su pañuelo de seda natural
junto a la soledad del rompeolas,
hoy nos muestra sus verjas inmortales

En una luz cualquiera de la proximidad,
después de haber andado de norte a sur los mapas
y comprender que el mundo
te pasa tibiamente
a menos de una hora de distancia,
se puede oír la letra
de una vieja canción que recordamos

Manuel que hermoso poema! Enhorabuena, merecido reconocimiento, poeta.

Abrazos,
ERA

[M. Sánchez]

ERA, mi agradecimiento por tu atención.
Un fuerte abrazo, amigo

[Isabel Moncayo]

Me agrada saberte tan involucrado a mi tierra, Manuel. Mi familia siempre ha estado y sigue estando vinculada a la minería.

Enhorabuena por el reconocimiento a tu hermoso poema, un abrazo.

[M. Sánchez]

Bueno Isabel, los mineros somos buena gente. Directos, eso sí. Sabemos valorar el esfuerzo, porque conocemos lo que cuesta pedirle prestada un poco de tierra a la naturaleza.
Muchas gracias por tu comentario y un abrazo

[Josefa A. Sánchez]

enhorabuena por el merecidísimo reconocimiento a un poema de gran calidad lírica. Felicidades.
Un abrazo.
Pepa

[M. Sánchez]

Pepa, mi sincero agradecimiento por tu atención y tu amabilidad, amiga.
Un fuerte abrazo

[Ramón Carballal]

Mi felicitación por el merecido reconocimiento. Un abrazo.

[M. Sánchez]

Gracias Ramón. Ha sido una acogedora bienvenida, la de este foro, seguramente influido por ti.
Un fuerte abrazo, amigo

[Ricardo Serna G]

Manuel Sánchez,

Interesante poema, querido amigo

te felicito por el reconocimiento

Un abrazo fuerte

[Juan Cruz Bordoy]

Me has dejado sin palabras Manuel. No puedo decir solo hermoso, a tu modo de expresar la soledad.
Un abrazo,
Juan Cruz.