Editorial Alaire

He visto tus manos de azúcar
y decías amor, y lo cuajabas todo,
el almíbar al borde de sus pestañas y los dedos
y decías amor y la infancia, de repente a punto de hilo el labio
sobre su alma.

Le decías mi amor, y una cosa adelgaza mi garganta
y es ahogo, fin que se aborda y tiembla ... y temo,
- madre – ese baile suavecito que me espanta por no visto,
- madre – de los labios que besaron sin reproches
que engendraron siete vidas y mil noches con BlancaNieves.

Os decíais amor y él duerme – madre – mientras tus manos de azúcar
lloran tres de diciembres (él cumple noventa y dos años).







3/12/07


( ¿Qué decirte, corazón mío, ahora, 22 de Junio de 2010? Me cuentas que no quieres ir a la boda de Marisa, tu nieta y sobrina mía, porque él no está, me cuentas cómo eráis de novios, el inmenso amor vuestro, me cuentas ¡ cómo si yo no hubiera vivido todo, cómo si no lo supiera de memoria...y no lloras, se te cuajan los ojos, mamá... deberías llorar, no seas tan fuerte y ¿vamos a la boda el día 10? Tu hijo y mi hermano te esperan.)

es una hermosa poesía señora concha. abel

Abel Sánchez Duarte escribió:es una hermosa poesía señora concha. abel

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Gracias por tu paso, amigo.
Es un poema para ellos, mis padres.
Mis saludos siempre.

Qué tierno, Concha. Y qué bello.

Aplausos, guajina.

Blanca

Concha Verónica Vidal escribió:He visto tus manos de azúcar
y decías amor, y lo cuajabas todo,
el almíbar al borde de sus pestañas y los dedos
y decías amor y la infancia, de repente a punto de hilo el labio
sobre su alma.

Le decías mi amor, y una cosa adelgaza mi garganta
y es ahogo, fin que se aborda y tiembla ... y temo,
- madre – ese baile suavecito que me espanta por no visto,
- madre – de los labios que besaron sin reproches
que engendraron siete vidas y mil noches con BlancaNieves.

Os decíais amor y él duerme – madre – mientras tus manos de azúcar
lloran tres de diciembres (él cumple noventa y dos años).







3/12/07

decías amor y la infancia, de repente a punto de hilo el labio
sobre su alma.

Estos versos de lujo querida amiga.
Besotes.
Marlo

ternura por os cuatro costados, Concha,

y decías amor, y lo cuajabas todo,

un besito...........Pilar

Querida Concha. Ya te he dicho muchas veces que me encanta tu personal concepción de la poesía. Hoy, que te buscaba por otra cosa, me encuentro con una verdadera joya de sensibilidad, elegancia, delicadeza y originalidad.
Pero hoy te he buscado para desearte la mayor de las felicidades en tu onomástica.
Un fuerte abrazo.

He visto tus manos de azúcar
y decías amor, y lo cuajabas todo,

..................................

Os decíais amor y él duerme – madre – mientras tus manos de azúcar
lloran tres de diciembres

Un poema tremendamente entrañable y de extraordinaria sensibilidad. Te felicito por tan precioso poema y manera de decir.

Un beso que te llegue al corazón

Ana V.

Ahhh!!!!, Concha, que me lo encontré en las sombras, y se posó como un rayo sobre mis ojos. Se me enciende el corazón con estas palabras. Me queman.

Abrazos, muchos abrazos en la distancia

Estoy de acuerdo con Just, un poema hermoso y finísimo en sensaciones!

Enhorabuena!!!

Hallie

Yose escribió:Precioso y entrañable, Concha.
Un besazo.
Yose

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Yose ... ¿dónde andas?
Abrazos donde estés.

Blanca Sandino escribió:Qué tierno, Concha. Y qué bello.

Aplausos, guajina.

Blanca

Concha Verónica Vidal escribió:He visto tus manos de azúcar
y decías amor, y lo cuajabas todo,
el almíbar al borde de sus pestañas y los dedos
y decías amor y la infancia, de repente a punto de hilo el labio
sobre su alma.

Le decías mi amor, y una cosa adelgaza mi garganta
y es ahogo, fin que se aborda y tiembla ... y temo,
- madre – ese baile suavecito que me espanta por no visto,
- madre – de los labios que besaron sin reproches
que engendraron siete vidas y mil noches con BlancaNieves.

Os decíais amor y él duerme – madre – mientras tus manos de azúcar
lloran tres de diciembres (él cumple noventa y dos años).







3/12/07

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¡¡ Mi querida Blanca¡¡¡¡

Ahora estaréis juntos .el, y tú, allá, donde sólo pueden estar juntos los nobles.

Cuánta delicadeza y sensibilidad para este poema. Te atrapa sin remedio.
Un abrazo
Pilar