Editorial Alaire

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Era rubia, su cabello gastado
cuando se fue (aparcado el fusil del odio)
formando en los cristales el hambre sin espejos,
sólo ojos de mirar ensombrecido,
y nudos envolviendo su cintura.

Todavía era rubia al presentir
que no clareaba para todos,
que sólo atardeceres grises
serían el regreso a su existencia.

ll

¿Y la tierra?
Yo, que nací en un entorno yermo,
donde dios escondió su mano
y los astros giraron en busca de un espacio fértil.

Guardo la sed del cántaro quebrado
y el equívoco parto.
No hay memoria en mi vientre
ni palabra que nombre la codicia,
furtiva soy del mundo
y a veces me abandono.


lll
Nació rubia y partió huérfana de la tierra
-encarcelado tiempo sometido a su cuna-

…y tantos ojos mirando

Un poema triste, Pilar. La última estrofa en particular estremece. Buen trabajo, amgia. Un abrazo.

Que melancolía te invade al leer estos versos. Magnífico poema. Un deleite leerte.
Un abrazo.
Pepa

Lo que miraban los ojos lo describes lírica y emotivamente
para que la reflexión coincida con la búsqueda que reclamas.

Un abrazo

Guillermo

Ramón Carballal escribió:Un poema triste, Pilar. La última estrofa en particular estremece. Buen trabajo, amgia. Un abrazo.

A veces la vida para algunos es triste o no existe, es vacío y hambre.
Gracias por tus amables palabras
Abrazos
Pilar

Pilar, siempre es un gusto leer tus hermosos poemas, este triste pero igualmente bello. Un saludo cordial.

Josefa A. Sánchez escribió:Que melancolía te invade al leer estos versos. Magnífico poema. Un deleite leerte.
Un abrazo.
Pepa

Gracias, Josefa, por acercarte a leer y decirme lo que piensas
Abrazos
Pilar

"Guardo la sed del cántaro quebrado
y el equívoco parto.
No hay memoria en mi vientre
ni palabra que nombre la codicia,
furtiva soy del mundo
y a veces me abandono."


Melancolico poema a la realidad de nuestras imperfecciones. Lo cierto es que vivimos en un mundo absurdo en busca de significados, y esa monstruosa ( en tamano, y muchas veces en aspecto) da pie a la creacion del arte haciendo bello lo que de otra forma es horroroso e incomprensible. Tal es la hermosa desnudez de tu poema. Un placer encontrarlo hoy.

Abrazos,
ERA

Pilar, tuve la oportunidad de leer este poema el otro día, cuando lo publicaste, aunque en ese momento no tuve la oportunidad de comentarlo. Ya la primera lectura me encantó y conmovió, por la melancolia que tan perfectamente consigues que transmitan los versos. Conforme he hecho nuevas lecturas, me ha ido gustando todavía más. Creo sinceramente que es un gran poema.

Un abrazo.

Mucha nostalgia en este poema hermoso y sentido. Felicitaciones, Pilar.

Guillermo Cuesta escribió:Lo que miraban los ojos lo describes lírica y emotivamente
para que la reflexión coincida con la búsqueda que reclamas.

Un abrazo

Guillermo

Gracias, Guillermo por acercarte y dejarme tus impresiones
Abrazos
Pilar

Javier Blanco escribió:Pilar, siempre es un gusto leer tus hermosos poemas, este triste pero igualmente bello. Un saludo cordial.

Gracias, Javier, por acercarte y dejarme tu amable huella
Abrazos
Pilar

Me gusta pilar:


Nació rubia y partió huérfana de la tierra
-encarcelado tiempo sometido a su cuna- (Pilar Morte)

Esos alejandrinos son muy buenos...

Un fuerte abrazo.

E. R. Aristy escribió:"Guardo la sed del cántaro quebrado
y el equívoco parto.
No hay memoria en mi vientre
ni palabra que nombre la codicia,
furtiva soy del mundo
y a veces me abandono."


Melancolico poema a la realidad de nuestras imperfecciones. Lo cierto es que vivimos en un mundo absurdo en busca de significados, y esa monstruosa ( en tamano, y muchas veces en aspecto) da pie a la creacion del arte haciendo bello lo que de otra forma es horroroso e incomprensible. Tal es la hermosa desnudez de tu poema. Un placer encontrarlo hoy.

Abrazos,
ERA

Gracias, E.R.A.por acercarte y decirme con tu amable comentario lo que piensas
Abrazos
Pilar

Pilar Morte escribió:l

Era rubia, su cabello gastado
cuando se fue (aparcado el fusil del odio)
formando en los cristales el hambre sin espejos,
sólo ojos de mirar ensombrecido,
y nudos envolviendo su cintura.

Todavía era rubia al presentir
que no clareaba para todos,
que sólo atardeceres grises
serían el regreso a su existencia.

ll

¿Y la tierra?
Yo, que nací en un entorno yermo,
donde dios escondió su mano
y los astros giraron en busca de un espacio fértil.

Guardo la sed del cántaro quebrado
y el equívoco parto.
No hay memoria en mi vientre
ni palabra que nombre la codicia,
furtiva soy del mundo
y a veces me abandono.


lll
Nació rubia y partió huérfana de la tierra
-encarcelado tiempo sometido a su cuna-

…y tantos ojos mirando

Hay un mensaje un tanto enigmático (para mí) una enorme tristeza que transmites muy bien, Pilar.
Tus poemas suben y suben... me encantan y te admiro. ¡Que lo sepas, guapina!
Un abrazo grande.