Editorial Alaire

Garabato nº14

¿Acaso no me mirabas de reojo
mientras disimulabas y dirigías a otros tu mirada?

¿Acaso no te turbó un poema
que despertó tus dormidos sentimientos?

¿Acaso no me dijiste que me amabas?

¿Acaso no has soñado con mi cuerpo entre tus sábanas?

¿Acaso no quieres, ahora, que te acompañe en tus sueños?

¿Acaso, ya, no necesitas mis caricias, ni mis palabras dulces?

¿Acaso la verdad ya no te gusta?

¿Acaso tengo que pedir siempre disculpas,
por estar cuando puedo,
por no estar cuando quieres?

¿Acaso, acaso, acaso?

O es que...
acaso,
la tortilla de patatas no debería llevar patatas.
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©Mar

Sube de la Sala de Espera.

Ja, ja ¡Qué final tan original! Me hiciste sonreir y te lo agradezco
Abrazos
Pilar

Con los ingredientes necesarios que los hiciste convenientess
dejaste un buen poema de amor disconforme y ocasional.
Acaso el amor necesita de todo eso.

Un abrazo

Guillermo

Pilar Morte escribió:Ja, ja ¡Qué final tan original! Me hiciste sonreir y te lo agradezco
Abrazos
Pilar

Pues a mi me encanta esa sonrisa, Pilar. Gracias a ti y un abrazo.

Guillermo Cuesta escribió:Con los ingredientes necesarios que los hiciste convenientess
dejaste un buen poema de amor disconforme y ocasional.
Acaso el amor necesita de todo eso.

Un abrazo

Guillermo

Bueno, Guillermo, el amor es caprichoso y seguro, no acaso, necesita de todo eso y más algunas veces, otras, la tortilla puede ir con o sin patatas
Gracias y un abrazo.