Editorial Alaire

I

Sembrada
Profundidad,
Osmosis y natura,
mirada y sonata,
silueta frotada
en las aguas
por hilos de plata.

II

Cantas.
Con voz de lejanía.
Al trascender la palabra
en lontananza
aún en las quebradas esquinas
al horizonte del alba

III

Plenilunio imperioso
del estruendo que cavas.
¡Flúyeme!
distinta y visible.

IV
Hazme fuente
Y reverso
De los versos que clamas
en lo que digo y canto:
Náyade¡Mujer de dulces aguas!
sé testigo ominoso de la sombra
en los espejos del alma.

Magníficos versos, un placer estar presente.
Abrazos

Un poema donde destaco la IVta estrofa sin menospreciar el resto. Gran lirismo, de exquisita confeccion, donde demuestras un gran dominio de la estructura. Me quedo con los dos versos del cierre.
Besos poeta.

Coincido totalmente con la apreciación de Raúl. Añadiría que me gusta el ritmo que imprimes al poema y que le da una sonoridad especial.
Un abrazo.
Julián Borao

Lila Manrique escribió:Magníficos versos, un placer estar presente.
Abrazos

Gracias Lila por tu mensaje y visita.besos

Que bella mujer del agua.

Excelente poema, Marian. También coincido con los comentarios anteriores en que la cuarta estrofa le da un realce especial a estos magníficos versos. Un beso grande.

Precioso. Gracias por compartir tu poema.
Un abrazo.




(Me gustaban las Ondinas, las creía de agua salada, pero no.
En fin, esa historia terminó) ...pensando en voz alta.

Raúl Castillo escribió:Un poema donde destaco la IVta estrofa sin menospreciar el resto. Gran lirismo, de exquisita confeccion, donde demuestras un gran dominio de la estructura. Me quedo con los dos versos del cierre.
Besos poeta.

Me halaga tu comentario Raúl.gracias por dejar tu huella y tu valiosa apreciación de mis letras.Besos se le quiere muahhh