Editorial Alaire

Si la pasión, si la locura no pasaran alguna vez por las almas…¿Qué valdría la vida?
Jacinto Benavente

Todos los días por esta vetusta escalera bajan o suben
corren y hablan aprendices estudiantes como yo,
casi siempre llego tarde a mis clases,
desde mi banco porque es tuyo
porque le puse también tu nombre
mientras las ardillas me comen
mis dedos te veo desde lejos
y los desconocidos que corren por el césped
me saludan sin mirarme.

Llegas con esa risa de simpatía que atrae amigos,
siempre apurada con la cadencia de tus piernas
en un perfecto ritmo a modo de relámpago
y mi compañero banco
parece que se estira para invitarte en su silencio.

Te veo hasta el último momento tras los cristales
y luego te imagino.

Muchas veces te adiviné ,
te encantaba que te inventara historias
porque la imaginación es el duende
de la varita mágica del amor.

Cerca está la plaza con su adivinador de carta
y la señora de las flores que me obliga a comprártelas aun,
al sur el lagos con sus aguas de colores sin embargo
nada comparable a nuestro banco.
Una vez le pusiste título de noble :
" El honorable Conde de las benditas tardes "
y me colgué de tus labios
con el disgusto de tu pelo por dejar de respirarlo
y de tu piel por no cubrirla
o el dedo gordo de tu pie por no besarlo.

Los que no tienen ojos para ver cuando saludan
me seguirán llamando el loco del banco
como petrificada estatua por la espera
él y yo más unidos esperando que un día llegues
y te sientes y me digas :
" ¿ Me permites ?
Mientras el siga extendiendo su silencio


lázaro

lazaro Habana escribió:



Si la pasión, si la locura no pasaran alguna vez por las almas…¿Qué valdría la vida?
Jacinto Benavente

Todos los días por esta vetusta escalera bajan o suben
corren y hablan aprendices estudiantes como yo,
casi siempre llego tarde a mis clases,
desde mi banco porque es tuyo
porque le puse también tu nombre
mientras las ardillas me comen
mis dedos te veo desde lejos
y los desconocidos que corren por el césped
me saludan sin mirarme.

Llegas con esa risa de simpatía que atrae amigos,
siempre apurada con la cadencia de tus piernas
en un perfecto ritmo a modo de relámpago
y mi compañero banco
parece que se estira para invitarte en su silencio.

Te veo hasta el último momento tras los cristales
y luego te imagino.

Muchas veces te adiviné ,
te encantaba que te inventara historias
porque la imaginación es el duende
de la varita mágica del amor.

Cerca está la plaza con su adivinador de carta
y la señora de las flores que me obliga a comprártelas aun,
al sur el lagos con sus aguas de colores sin embargo
nada comparable a nuestro banco.
Una vez le pusiste título de noble :
" El honorable Conde de las benditas tardes "
y me colgué de tus labios
con el disgusto de tu pelo por dejar de respirarlo
y de tu piel por no cubrirla
o el dedo gordo de tu pie por no besarlo.

Los que no tienen ojos para ver cuando saludan
me seguirán llamando el loco del banco
como petrificada estatua por la espera
él y yo más unidos esperando que un día llegues
y te sientes y me digas :
" ¿ Me permites ?
Mientras el siga extendiendo su silencio


lázaro

Estimado Làzaro, tus poemas, tus historias, tus anècdotas, tù, siempre conmovedor, desde la rebeldìa por todo aquello que es injusto, a la injusticia a veces, de las circunstacias, si es que asì se le puede llamar.
Me encantò este poema -aùn siendo una expresiòn algo vulgar- las imàgenes, la forma en que quien lee, se introduce y hace propia la pregunta final.
Un abrazo, Luna.-

Extraordinario, Lázaro. Podría ser el embrión de una película.

Me ha gustado mucho
Un abrazo
Ana

Tus poemas dan la sensación de autenticidad, éste se siente y se comparte. Un gusto seguir sus versos.
Abrazos
Pilar

Una historia bien contada, con mucho realismo, un gusto leer tu hermoso poema.
Un saludo.

Conmueves y dejas sentir, imaginar y soñar con tu letra, es un gusto leerte.

Un saludito.

Luna de Nos escribió:

lazaro Habana escribió:



Si la pasión, si la locura no pasaran alguna vez por las almas…¿Qué valdría la vida?
Jacinto Benavente

Todos los días por esta vetusta escalera bajan o suben
corren y hablan aprendices estudiantes como yo,
casi siempre llego tarde a mis clases,
desde mi banco porque es tuyo
porque le puse también tu nombre
mientras las ardillas me comen
mis dedos te veo desde lejos
y los desconocidos que corren por el césped
me saludan sin mirarme.

Llegas con esa risa de simpatía que atrae amigos,
siempre apurada con la cadencia de tus piernas
en un perfecto ritmo a modo de relámpago
y mi compañero banco
parece que se estira para invitarte en su silencio.

Te veo hasta el último momento tras los cristales
y luego te imagino.

Muchas veces te adiviné ,
te encantaba que te inventara historias
porque la imaginación es el duende
de la varita mágica del amor.

Cerca está la plaza con su adivinador de carta
y la señora de las flores que me obliga a comprártelas aun,
al sur el lagos con sus aguas de colores sin embargo
nada comparable a nuestro banco.
Una vez le pusiste título de noble :
" El honorable Conde de las benditas tardes "
y me colgué de tus labios
con el disgusto de tu pelo por dejar de respirarlo
y de tu piel por no cubrirla
o el dedo gordo de tu pie por no besarlo.

Los que no tienen ojos para ver cuando saludan
me seguirán llamando el loco del banco
como petrificada estatua por la espera
él y yo más unidos esperando que un día llegues
y te sientes y me digas :
" ¿ Me permites ?
Mientras el siga extendiendo su silencio


lázaro

Estimado Làzaro, tus poemas, tus historias, tus anècdotas, tù, siempre conmovedor, desde la rebeldìa por todo aquello que es injusto, a la injusticia a veces, de las circunstacias, si es que asì se le puede llamar.
Me encantò este poema -aùn siendo una expresiòn algo vulgar- las imàgenes, la forma en que quien lee, se introduce y hace propia la pregunta final.
Un abrazo, Luna.-

Gracias Luna..He podido estar poco con Ustedes y soy de los que sacrifico mis gustos por mios deberes pero siempre hallaré un minutico para agradecer.Tu puntualizas los detalles y eso te hace más grande


abrazos

lázaro.

Muchas de las historias que cuentas tienen la gran virtud de que el lector las sienta próximas y reconocibles. Eso me ha ocurrido a mí con éste poema que me ha transportado a otros tiempos. Me gustó leerlo. Un abrazo.

Hola Gitan.
Una locura maravillosa, amigo mío, la más hermosa que existe.
El poema tiene un cuidado trazo de intimidad y sosiego que me ha encantado.
Abrazos.
Mario.

Ana Muela Sopeña escribió:Extraordinario, Lázaro. Podría ser el embrión de una película.

Me ha gustado mucho
Un abrazo
Ana

Gracias Ana..De alguna manera la vida nos obliga
a ser actores.

abrazos

lázaro

La imaginación es el duende de muchas cosas, Lázaro.
Y ha de mezclarse con la realidad del amor, del dolor
de la alegría de la felicidad y de todo lo contrario
para que vaya haciéndose vida y poema.

un abrazo y mi aplauso a estos magníficos versos.

Guillermo

Pd.: De músicos , poetas y locos todos tenemos un poco (aunque unos tengan más que otros)

lazaro Habana escribió:



Si la pasión, si la locura no pasaran alguna vez por las almas…¿Qué valdría la vida?
Jacinto Benavente

Todos los días por esta vetusta escalera bajan o suben
corren y hablan aprendices estudiantes como yo,
casi siempre llego tarde a mis clases,
desde mi banco porque es tuyo
porque le puse también tu nombre
mientras las ardillas me comen
mis dedos te veo desde lejos
y los desconocidos que corren por el césped
me saludan sin mirarme.

Llegas con esa risa de simpatía que atrae amigos,
siempre apurada con la cadencia de tus piernas
en un perfecto ritmo a modo de relámpago
y mi compañero banco
parece que se estira para invitarte en su silencio.

Te veo hasta el último momento tras los cristales
y luego te imagino.

Muchas veces te adiviné ,
te encantaba que te inventara historias
porque la imaginación es el duende
de la varita mágica del amor.

Cerca está la plaza con su adivinador de carta
y la señora de las flores que me obliga a comprártelas aun,
al sur el lagos con sus aguas de colores sin embargo
nada comparable a nuestro banco.
Una vez le pusiste título de noble :
" El honorable Conde de las benditas tardes "
y me colgué de tus labios
con el disgusto de tu pelo por dejar de respirarlo
y de tu piel por no cubrirla
o el dedo gordo de tu pie por no besarlo.

Los que no tienen ojos para ver cuando saludan
me seguirán llamando el loco del banco
como petrificada estatua por la espera
él y yo más unidos esperando que un día llegues
y te sientes y me digas :
" ¿ Me permites ?
Mientras el siga extendiendo su silencio


lázaro

Extraordinario poema... me encanta tus imágenes, pero sobre todo... tu buen hacer. Te felicito amigo de corazón... eres un gran escritor.
Un abrazo, amigo.
BEGOÑA.

Me ha gustado mucho este poema, Lázaro, que lo sepas. Resulta soeprendente para tu edad la madurez poética que vas alcanzando.

Un fuerte abrazo

lazaro Habana escribió:



Si la pasión, si la locura no pasaran alguna vez por las almas…¿Qué valdría la vida?
Jacinto Benavente

Todos los días por esta vetusta escalera bajan o suben
corren y hablan aprendices estudiantes como yo,
casi siempre llego tarde a mis clases,
desde mi banco porque es tuyo
porque le puse también tu nombre
mientras las ardillas me comen
mis dedos te veo desde lejos
y los desconocidos que corren por el césped
me saludan sin mirarme.

Llegas con esa risa de simpatía que atrae amigos,
siempre apurada con la cadencia de tus piernas
en un perfecto ritmo a modo de relámpago
y mi compañero banco
parece que se estira para invitarte en su silencio.

Te veo hasta el último momento tras los cristales
y luego te imagino.

Muchas veces te adiviné ,
te encantaba que te inventara historias
porque la imaginación es el duende
de la varita mágica del amor.

Cerca está la plaza con su adivinador de carta
y la señora de las flores que me obliga a comprártelas aun,
al sur el lagos con sus aguas de colores sin embargo
nada comparable a nuestro banco.
Una vez le pusiste título de noble :
" El honorable Conde de las benditas tardes "
y me colgué de tus labios
con el disgusto de tu pelo por dejar de respirarlo
y de tu piel por no cubrirla
o el dedo gordo de tu pie por no besarlo.

Los que no tienen ojos para ver cuando saludan
me seguirán llamando el loco del banco
como petrificada estatua por la espera
él y yo más unidos esperando que un día llegues
y te sientes y me digas :
" ¿ Me permites ?
Mientras el siga extendiendo su silencio


lázaro

Me gustó mucho el poema, Lázaro y su correspondencia con la imagen del banco. Ya la imagen abre un abanico de sensaciones, ni qué decir la lectura del poema completo.
Hermoso, hermosísimo!

Besos.

Pilar Morte escribió:Tus poemas dan la sensación de autenticidad, éste se siente y se comparte. Un gusto seguir sus versos.
Abrazos
Pilar

Gracias Pilar. El placer de acomodar las situaciones olvidando...
y a seguir dándole a la tecla.

abrazos siempre


lázaro.