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A Juan Eduardo Cirlot

Publicado: Mar, 17 May 2011 21:30
por Ana Muela Sopeña
Los vientos y las vírgenes desnudan
la piedra en donde asciende el horizonte.


Juan Eduardo Cirlot


Descendí a la caverna de Lilith
y desde allí observé toda la luz,

los símbolos envueltos en penumbra
me hablaban con sus arcos de oro y jade.

En un edén disperso por la brisa
aterrizaste raudo entre la sangre,
con la grieta sublime de la piel,
como si todo fuese un arquetipo.

Con ceremonias blancas, entre cálices
y dioses del antiguo paganismo
sabías que las células del hombre
se inundaban de sombra o de palabras.

Descendí hasta la gruta de las madres
con serpientes mitraicas de las aguas,
allí te vi cantando una elegía
a los árboles druídicos de un cuento.

En las cartas del póker de la Tierra
encontré muchas claves de poder.

Diamantes con castillos sin almenas,
donde sentí la magia de la ausencia

y las picas radiantes de venganza
usurpando el amor de las guaridas.

Los tréboles con humo de las chozas
que perseguían un damero rojo

y corazones dúctiles de arena,
con amantes perdidos en desiertos.

Después de terminar con la partida
adiviné horizontes en subsueños
en los que había números marcados,
ocultos en las piedras del enigma.

Me sumergí en silencios primigenios
con la voz consagrada al Hacedor
y pedí a las montañas un sonido,
tan sólo una señal de lo absoluto.

Entonces te vi alzando las metáforas
entre vientos y rocas, sin ceniza,
con mujeres desnudas y danzantes
que adoraban el aire de un espejo.

Un día entronizaste cada signo
con ráfagas de fuego entre la lluvia
y aprendiste que todo tiene un precio,
incluso las anáforas del alma.

Los círculos amados del ensueño
resultaron ser trampas de la mente,
donde agarrar el rumbo del futuro
y esperar las estrellas sin el pánico.

Perséfone en su cámara del éter
me trajo tu palabra seductora,
con verbos delirantes y mortíferos
unidos a semillas sin relojes.

Los mundos adheridos a tus horas
alumbraron esferas laberínticas,
entre la nieve cálida de invierno
y la escarcha tan fría del espacio.

Ahora te imagino entre las runas
con tu música errante en melodía,
vislumbrando un relámpago sutil
que arropa en semisueño la belleza.


Ana Muela Sopeña

Publicado: Mié, 18 May 2011 14:43
por Javier Dicenzo
Ana: tremendo poema dónde se hace presente lo místico, lo mitológico felicitaciones da gusto estar con escritores de tu altura literaria.abrazo
javier

Re: A Juan Eduardo Cirlot

Publicado: Jue, 19 May 2011 11:28
por Marisa Peral
[quote="Ana Muela Sopeña"]

Precioso, Ana, no hay una sóla estrofa que no merezca un comentario. Magnífico poema que he dusfrutado de principio a fin.
Felicidades compañera.
Un abrazo.

re: A Juan Eduardo Cirlot

Publicado: Jue, 19 May 2011 16:02
por Pilar Morte
Un poema muy interesante, Ana, profundo y sabio
Abrazos
Pilar

Publicado: Vie, 20 May 2011 15:16
por Miguel Santillana
Unos versos hermosos que hacen amena la lectura hasta el final. Felicitaciones.

Publicado: Sab, 21 May 2011 18:13
por Vicente Santisteban
Estupendos versos para disfrutar de poesía bella. Un placer leerte.
Mis saludos.

Publicado: Sab, 21 May 2011 18:56
por Josefa A. Sánchez
Ritmo y fuerza en este homenaje profundamente sentido. Un placer estar.
Un abrazo.
Pepa