Editorial Alaire

IV

Él vivía para sus ojos sin norte.

Para los ojos míos,
ojos de esencia traviesa
que se alzan a observar las estrellas,
quizás ojos de ritos ancestrales
dilatados de soles,
ojos que te cincelaron con signos medioevales,
ojos de escarcha asaetados en imperdibles,
fondeados en Mares Marginales,
borrachos de algas y profundidad.
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© MAR – Mayo2010

Sube de la Sala de Espera.

Nos sigue salpicando tu agua de mayo en forma de versos. Un placer de lectura.
Un abrazo.
Pepa

Esata agua sigue siendo un acierto. un gusto seguirla
Abrazos
Pilar

Josefa A. Sánchez escribió:Nos sigue salpicando tu agua de mayo en forma de versos. Un placer de lectura.
Un abrazo.
Pepa

Gracias de nujevo, Pepa.
Un abrazo.

Pilar Morte escribió:Esata agua sigue siendo un acierto. un gusto seguirla
Abrazos
Pilar

Un gusto que la sigas, gracias y un abrazo.