La Editorial Alaire, auspiciada por la Academia de Poesía Alaire, pone gratuitamente a disposición de sus foristas registrados, varios foros de poesía, prosa literaria, debates…, para que puedan publicar sus obras e interactuar entre ellos, así como, la tienda de libros donde se muestran las publicaciones, tanto en papel como en formato digital, estos mediante descarga gratuita. La razón de ser de nuestros foros se centra en promocionar la poesía, mediante las obras de los autores que participan en la plataforma de la Academia de Poesía Alaire. La promoción de la poesía, a nivel del mundo de habla hispana, conlleva una enorme responsabilidad, por ello, pedimos la máxima implicación de todos los miembros de Alaire. Vale recordar al gran maestro Dumas: uno para todos y todos para uno. Muchas gracias por todo, queridos compañeros.
Del jardín de las flores una rosa cayó.
Un caballero que por allí pasaba
del suelo la recogió.
Se la llevó a su boca
y de su fragancia se impregnó.
La rosa que bella era
de sus labios se enamoró,
de su piel tan delicada
de su esmerada educación.
Se asomó por allí una dama
que un espejismo creyó ver,
una rosa enamorada
de su amante más fiel.
Se encamino hacia su lado
y al preguntar:
-¿Que emulante perfume desprendes amado mío?
El caballero presto
así le contestó:
-Es la rosa de tus labios
de tus besos y de mi corazón.
La rosa al oír esto
en sangre se convirtió,
para pasar por sus venas
inundada de pasión.
Última edición por Begoña Egüen el Sab, 01 Feb 2014 14:19, editado 1 vez en total.
Del jardín de las flores una rosa se cayó,
un caballero que por allí pasaba del suelo la recogió,
se la llevó a su boca y de su fragancia se impregnó.
La rosa que bella era, de sus labios se enamoró,
de su piel tan delicada de su esmerada educación.
Se asomó por allí una dama que un espejismo creyó ver,
una rosa enamorada de su amante más fiel.
Se encamino hacia su lado, y al preguntar:
-¿Que emulante perfume desprendes amado mío?
El caballero presto, así la contestó:
-Es la rosa de tus labios, de tus besos y de mi corazón.
La rosa al oír esto en sangre se convirtió,
para pasar por sus venas inundada de pasión.
Muy naturales y sencillos versos, expresados con ese genuino candor
que todos necesitamos
abrazos Begoña
lázaro
!Hay que ser valiente para ser poeta!
Hay que estar loco.
A la literatura, al amor y a los animales
no se les puede hacer trampas.
Del jardín de las flores una rosa se cayó,
un caballero que por allí pasaba del suelo la recogió,
se la llevó a su boca y de su fragancia se impregnó.
La rosa que bella era, de sus labios se enamoró,
de su piel tan delicada de su esmerada educación.
Se asomó por allí una dama que un espejismo creyó ver,
una rosa enamorada de su amante más fiel.
Se encamino hacia su lado, y al preguntar:
-¿Que emulante perfume desprendes amado mío?
El caballero presto, así la contestó:
-Es la rosa de tus labios, de tus besos y de mi corazón.
La rosa al oír esto en sangre se convirtió,
para pasar por sus venas inundada de pasión.
Muy naturales y sencillos versos, expresados con ese genuino candor
que todos necesitamos
abrazos Begoña
lázaro
Muchas gracias estimado amigo por leerme. Es un honor tenerte en mis letras.
Un abrazo.
BEGOÑA.