a veces cursi,
como un madril con lazos azules en las pestañas
y es entonces cuando escribo de fuera a afuera:
que si el mar se me adelgaza en la línea de los besos,
que Madam Doña Ciempiesa ha perdido su liguero
y parece una pilinguis,
Doña Hibiscus dio a luz un botón del color de los trigales..
... hablo, en fin,
de las cosas importantes.
Esto pasa cuando tengo mariposas de papel en la barriga.
Mas en pausas...
un glaciar se me atrapa en las entrañas,
tartamuda es mi docencia, la PALABRA se confunde
entre celdas sin abejas.
Y no hay miel, ni halcón, ni siquiera una cigüeña
que me arranque la mudez de los adentros.
Es entonces,
cuando mar se hace huequito y me travisto de roca.
Somos uno en venero de horizonte.
(Pues bien, hoy termina Marzo en Alicante al menos y Abril es promesa, siempre promesa de nacimiento)
