Editorial Alaire

Es barrido lineal, esta amplitud del léxico
de interface dipuesta a la vendimia
en variable calculada
para cumplimiento global, de un determinado ciclo evolutivo.

Consustancial el marchitarse, como se marchitan las estrellas,
desde el epicentro vulnerable de su íntegra estructura. Todo es tránsito
en el versátil pentagrama del matraz del universo.....Lo sé.

Pero, es canción que me lacera
en su resbalar agónico. Y pienso, en escribir el límite
de la tendencia al rojo del espectro. Radiación
asíntota a mis manos
por mucho que respire, el cianhídrico ritual de la costumbre.

Miro el ocaso con nostalgia
en su desmadejado exanguinarse,
acariciando la retina, el gradiente grana, de su gasa extracorpórea.
Y, a pesar de la tentación del abandono
a la eterna paz de la frialdad silícea,
siento
que continuarán mis huellas,
cohabitando del dialéctico raíl,
hasta la extenuación postrera de la sombra.

Es un poema (como todos los tuyos) en el que el fondo prevalece sobre la forma. Esta, la forma, es compleja, llena de matices ignotos. Pero el fondo se trasluce como un contenido psíquico muy individualizado que se desprende de todas y cada una de las metáforas. Un contenido psíquico sumamente elaborado, profundo y de amplitud universal. Has obviado la esencia de las cosas y has querido traspasar las fronteras de lo que nos es dable conocer con la mera razón. Hay en tu poesía una pretensión de aprehender lo trascendente usando la intuición como vehículo. El lenguaje llega a su máxima cota. No da para más. Después de este poema, solo dejarse llevar por lo vivo.

Un beso, querida.

Consustancial el marchitarse, como se marchitan las estrellas,
desde el epicentro vulnerable de su estructura íntegra. Todo es tránsito
en el versátil pentagrama del matraz del universo.....Lo sé.


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Y pienso, en escribir el límite
de la tendencia al rojo del espectro..


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Y, a pesar de la tentación del abandono
a la eterna paz de la frialdad silícea,
siento
que continuarán mis huellas,
cohabitando del dialéctico raíl,
hasta la extenuación postrera de la sombra

Este es un poema que me ha cautivado, lo acabas de colgar y ya lo he leído cuatro veces. Este matraz del universo donde todo se funde, las certezas, las dudas y los miedos. Y entre las certezas que yo precipito en este matraz está la de que tu huella quedará en el tiempo y por encima de cualquier sombra que quiera cubrirla. Como ya te dijo hace poco Francisco, tienes una riqueza de léxico impresionante y una habilidad única para escribir, que queda patente no sólo en este poema sino en todo lo que escribes. Y sobrevolando a todo ese léxico está el fondo de tus poemas,un fondo impresionantemente profundo.

Un beso que te llegue al corazón

Ana V.

Utizas un léxico complejo y sumamente atractivo. Unos versos profundos y un poema que necesita relectura para apreciarlo en toda su dimensión. Gran trabajo. Un abrazo.

Pilar


Lenguaje y verso con maestría, querida amiga

te felicito


Un beso fuerte

Un feliz encuentro con tus versos. Una exquisita lectura como pasar las manos en la seda. Un abrazo Poeta, Horacio.

Pero, es canción que me lacera
en su resbalar agónico. Y pienso, en escribir el límite
de la tendencia al rojo del espectro.

Poema reflexión sobre la tendencia del universo al colapso energético y gravitatorio, pero la poeta parace apostar por una huella indeleble de lo vivo.

Y, a pesar de la tentación del abandono
a la eterna paz de la frialdad silícea,
siento
que continuarán mis huellas,
cohabitando del dialéctico raíl,
hasta la extenuación postrera de la sombra.


Como siempre tu poesía es una experiencia distinta y enriquecedora.

Bicos, querida Pilar

Pilar: El "leiv motiv", lo que nos empuja a cambiar todo, aún aquello que parece detereminado desde siempre. Será que fuimos creados como las estrellas para extinguirnos, ellas aceptan con la docilidad que sólo puede tener una estrella, pero nosotros nos negamos y buscamos la manera de variar ese destino... no, yo tampoco permito exitnguirme en la tristeza. De nuevo, precioso, precioso.
Hay días mi amiga en que se nos carga la tristeza y surgen poemas como este tuyo, EXTRAORDINARIOS. Un beso que en algo disminuya ese estado. Momia de Española,jejeje.

No dudes de tus tres últimos versos, Pilar, incluso después de que esa sombra se diluya.

No conozco a nadie que escriba como tú, porque lo tuyo no es exactamente surrealismo poético, no, es más bien un realismo innato y palpitante, ese interior que lucha por quedarse en las palabras.

Un abrazo desde la isla, Pilar.

Luis Oroz.

Está claro que es un poema tuyo, Pilar, aunque no lo firmaras. Tienes un decir tan personal que crea estilo. Una utilización de jerga profesional que, a pesar de su dificultad, consigue perfectamente inmiscuirse en la profundidad del mensaje y fundirse con esa estética atrayente de tus versos. Tus poemas hay que leerlos despacio, pronunciando cada verso, y quedarse callado al terminar. Enfrascado en el silencio en el que tu palabra se mantiene como un eco asombrado.
Un abrazo.
Julián Borao

mi querido Jerónimo,

eres en extremo generoso conmigo.........ignoro en realidad lo que me impele a sacar del epicentro de mí la reflexión de esta forma.................pero, en una cosa tienes razón, y es que priorizo sobre la forma, el contenido, el cual, ciertamente es en extremo elaborado, mas no en su realización temporal, sino como síntesis de toda una vida que ya, va alcanzando su fin.....................quizá sea un error,...quizá esto no pueda llamarse poesía....no lo sé

mi beso hasta esa costa sur, que tus inquisitivos ojos examinan cada día..........Pilar

Pilar, con tu léxico y tu forma de versar me he metido en el epicentro del poema y del universo. Estoy atrapada, sálvame.

Un placer enorme leerte, amiga. Y un beso enorme con estrellas encendidas.

Pilar

Cuentas que las olas de las palabras riegan la playa humana, y que es frágil el mundo. También que brindamos en ello, en esa fragilidad.
Tú miras tan allá... y nos cuentas lo que ves: una linea recta o espejismo de un círculo infinito, como ya alguien del Renanacimiento dijo.
Tu última estrofa es esperanzadora, porque así, podremos seguir ilusionados con la posibilidad de lectura de otros nuevos poemas tuyos.

Un abrazo
Raúl

mira, Ana, querida amiga,

me vas a emocionar con esos efusivos comentarios tuyos........que, no voy a negar me placen (sería hipócrita negarlo), pero, sé que nacen de un generoso corazón que lee con subjetividad, en este caso

de todas formas, fuera lo que fuere,.............es lo que hay, ¡qué se va a hacer!!

y ya a mis años, como digo en el poema...sólo seguir por los raíles, caminando hasta el final

un besazo desde la meseta, hasta tu hermosa tierra.........Pilar

De tu rico poema, exuberante como un incendio despiadado de expresiones técnicas, utilizadas como imágenes poéticas, llenas de vida y de vigor, que piden sitio en nuestra poética actual (perdona este largo periodo introductorio)

me quedo con esta descripción fúlgida del ocaso, introspectiva, pero dibujada con una imaginería poética de gran calidad, que transmite hermosas sensaciones:


Miro el ocaso con nostalgia
en su desmadejado exanguinarse,
acariciando la retina, el gradiente grana, de su gasa extracorpórea.
Y, a pesar de la tentación del abandono
a la eterna paz de la frialdad silícea,
siento
que continuarán mis huellas,
cohabitando del dialéctico raíl,
hasta la extenuación postrera de la sombra.


Un beso, admirada poeta Pilar


javier