Editorial Alaire

Opus Corpus

Era tangible como el baño del osezno promovido a pleno radio.
Era juntada en puño protestante cual gesto amatorio de equinoccio.
Desencadenaba venialmente la permeabilidad laboral de la mañana.
Proyecto de amatista calva entre las neuronas torneadas del chubasco.
Mente constructora de la vitamina universal color durazno.
En este mapa inveterado: el cuerpo hacía lo mejor civilizando.

Siendo la gestalt caligráfica de la saliva convulsa sobre el llanto.
Advertidos por la milicia de la mancha orfebre, perpetrados como moscas consecuentes.
A remo traviesa relampagueando en perspectiva ovoide.
Dos búsquedas lingüísticas desencarnadas en el sauce de la sangre.
El cuerpo acontecía convincente bajo las bombas del ocaso.

Cuerpo de la aurora con seis gotas parisinas en el ánfora del seno.
Cuerpo continuo matemático vuelto esoterismo de la mano.
Masajeada cadera material del módulo gaseoso diluviano.
Acupuntura de la lengua entre las masas tamizadas, coagulando.
Entonces el alma del alma era la piel aparecida, penitente.

Fantasma epicéntrico del poro gestionado y democrático.
Beso imperial obligado nalga a nalga a la retorta tornasol del alienado.
Estampida seminal atomizada sobre la deposición de la paloma: socialismo de azahares.
Y la proa de tu índice infernal haciendo el do menor de la tardanza.
Y si embargo, lo mejor eran los cuerpos,
en añico fluorescente maquinando.


Rafael Teicher

Sube de la Sala de Revisión.

Rafael, te retomo este poema que me encuentro vagando por ahí, como hoja de otoño.
Es realmente bueno, a mi entender , creo que vale la pena rellerlo.
Saludos mediterráneos siempre.













http://www.labrujadelcerezo.blogspot.com

Una muestra de la poesía del gran Rafael Teicher.