Editorial Alaire

Me han encantado esos ovillejos de Julio, sobre todo por algo que creo que debemos hacer de vez en cuando porque es muy saludable: Reirnos de nosotros mismos.
Por eso dejo estas espinelas. Comentar, que casi todos los semicalvos de mi generación solemos decir que perdimos el pelo en el servicio militar.



Pelos


No temo perder el pelo
porque lo tengo tan ralo,
tan escaso, fino y malo
que ya no le guardo celo.
Sólo es que tengo recelo
a que me engañen con cosas
que prometen portentosas
y luego no se hacen ciertas,
prefiero entradas abiertas
a lociones milagrosas.


…………………………


Hay pelones estresados
que darían lo que fuera
por lucir la cabellera
de los astros afamados.
Como no fueron los hados
clementes con su derecho,
tratan de paliar el hecho
soltándose la camisa,
para que admiréis sin prisa
la pelambrera del pecho.


…………………………


Debo confesarte amigo,
que en este calvo problema
tengo como tú un dilema
y a Dios pongo por testigo.
Pues mi ‘tupe’ no da abrigo
a mi cabeza pensante
porque no tengo delante
ni detrás pelo de tonto,
ya que lo perdí muy pronto
en la milicia farsante.






Mario

Me ha encantado la brillantez de tus versos sin alopecia , querido Mario. Finos, inteligentes y mil veces disfrutables.

Un abrazo fuerte.

Hallie

Me has hecho sonreir y eso es de agradecer, Un poema muy bien escrito, como siempre
Abrazos
Pilar

Genial, Mario, como todo lo que escribes.

Humor a raudales.

Enhorabuena
Un beso
Ana

Que bueno Mario me dan ganas de ponerme a probar esto de las Espinelas, aún a riesgo de perder pelo...

Me ha gustado mucho, muchisimo.
Me he reído y me ha parecido excelente en ritmo , rima y música.

Un fuerte abrazo

Joan

Gracias Hallie.
Tienen unos añitos, pero como siempre habrá calvos, no pierden actualidad

Abrazos, amiga mía.

Mario.

Sin mesarme los cabellos,
puedo apuntar ciertamente,
que en el momento presente
no tengo escasez de ellos,
aunque no sean muy bellos
aun no muestro de estos mengua
y espero que se mantenga
la actual naturaleza:
tener mucho en la cabeza
pero ninguno en la lengua.

Con
un abrazo.
Pepa

Gracias Pilar, es lo que buscaba, la sonrisa. Abrazos.
Mario.

Gracias, Ana, amiga mía, eso pretendía, haceros sonreir. Un abrazo.
Mario.

Mario Martínez escribió:Me han encantado esos ovillejos de Julio, sobre todo por algo que creo que debemos hacer de vez en cuando porque es muy saludable: Reirnos de nosotros mismos.
Por eso dejo estas espinelas. Comentar, que casi todos los semicalvos de mi generación solemos decir que perdimos el pelo en el servicio militar.



Pelos


No temo perder el pelo
porque lo tengo tan ralo,
tan escaso, fino y malo
que ya no le guardo celo.
Sólo es que tengo recelo
a que me engañen con cosas
que prometen portentosas
y luego no se hacen ciertas,
prefiero entradas abiertas
a lociones milagrosas.


…………………………


Hay pelones estresados
que darían lo que fuera
por lucir la cabellera
de los astros afamados.
Como no fueron los hados
clementes con su derecho,
tratan de paliar el hecho
soltándose la camisa,
para que admiréis sin prisa
la pelambrera del pecho.


…………………………


Debo confesarte amigo,
que en este calvo problema
tengo como tú un dilema
y a Dios pongo por testigo.
Pues mi ‘tupe’ no da abrigo
a mi cabeza pensante
porque no tengo delante
ni detrás pelo de tonto,
ya que lo perdí muy pronto
en la milicia farsante.






Mario

Bueno conmigo no has conseguido sonrisas, sino carcajadas
Me ha gustado tu ingenio y tu agudeza

Felicidades se agradece el rato

Un abrazo. Gabriel

Me recuera la poesía campesina de Cuba, la décima
Muy bueno Mario

abrazos.

lázaro.

Amigo Mario,

Gracias por esas espinelas tan bien armadas y llenas de humor. Yo no tuve servicio militar así que puedo culpar a mi alopecia enteramente a la genética, jejej

Saludos amigo

Javier

Como siempre, un ejemplo de técnica espectacular.

Nos vemos en Bilbao.

Un fuerte abrazo.

Mario, lo disfruté muchísimo, ahora que le sigan las décimas!!!!!!!!!!

Unas espinelas plenas de ingenio. Me lo he pasado estupendamente leyéndolas. Un abrazo, Mario.