La Editorial Alaire, auspiciada por la Academia de Poesía Alaire, pone gratuitamente a disposición de sus foristas registrados, varios foros de poesía, prosa literaria, debates…, para que puedan publicar sus obras e interactuar entre ellos, así como, la tienda de libros donde se muestran las publicaciones, tanto en papel como en formato digital, estos mediante descarga gratuita. La razón de ser de nuestros foros se centra en promocionar la poesía, mediante las obras de los autores que participan en la plataforma de la Academia de Poesía Alaire. La promoción de la poesía, a nivel del mundo de habla hispana, conlleva una enorme responsabilidad, por ello, pedimos la máxima implicación de todos los miembros de Alaire. Vale recordar al gran maestro Dumas: uno para todos y todos para uno. Muchas gracias por todo, queridos compañeros.
La ausencia disminuye las pequeñas pasiones
y aumenta las grandes, lo mismo que el viento apaga las velas y aviva las hogueras. François de la Rochefoucauld
Uno tiene la costumbre,
la mala acostumbre
de perdonárselo
todo
Y morir con el gastado vicio de creerse sus mentiras,
eso es normal
ser un tonto es normal.
A veces nos quejamos de la rudeza de afuera
o la lluvia en la ropa,
es natural que nos veamos gigantes
y sepamos también decir hola
cuando el vecino pase
y no sepamos
preparar unos espagueti a la Boloñesa
como los preparaba ella
con carne de ternera
y el rojo Cabernet Sauvignon
a la luz de la vela
y su beso
antes de la oración.
Es natural la vanidad de callarse
y disfrazar los actos como si no faltara nada
como si la pijama de corazones rojos
colgada tras la puerta
no tuviera alas
o el piano pudiera tocar solo
o enterrar bajo mis uñas
algo más que libros y muertos
o que te vea
en todas las siluetas
aferrándome a estos párpados
cerrados que pesan toneladas
por tu ausencia.
Mañana no justifico nada.. nada,
una linda rosa roja en tu cama
esperando que vuelvas.
Gitano
!Hay que ser valiente para ser poeta!
Hay que estar loco.
A la literatura, al amor y a los animales
no se les puede hacer trampas.
La ausencia disminuye las pequeñas pasiones
y aumenta las grandes, lo mismo que el viento apaga las velas y aviva las hogueras. François de la Rochefoucauld
Uno tiene la costumbre,
la mala acostumbre
de perdonárselo
todo
Y morir con el gastado vicio de creerse sus mentiras,
eso es normal
ser un tonto es normal.
A veces nos quejamos de la rudeza de afuera
o la lluvia en la ropa,
es natural que nos veamos gigantes
y sepamos también decir hola
cuando el vecino pase
y no sepamos
preparar unos espagueti a la Boloñesa
como los preparaba ella
con carne de ternera
y el rojo Cabernet Sauvignon
a la luz de la vela
y su beso
antes de la oración.
Es natural la vanidad de callarse
y disfrazar los actos como si no faltara nada
como si la pijama de corazones rojos
colgada tras la puerta
no tuviera alas
o el piano pudiera tocar solo
o enterrar bajo mis uñas
algo más que libros y muertos
o que te vea
en todas las siluetas
aferrándome a estos párpados
cerrados que pesan toneladas
por tu ausencia.
Mañana no justifico nada.. nada,
una linda rosa roja en tu cama
esperando que vuelvas.
Gitano
Hola Lazaro me gusto tu poema de nostalgia:
o que te vea
en todas las siluetas
aferrándome a estos párpados
cerrados que pesan toneladas
por tu ausencia.
Mañana no justifico nada.. nada,
una linda rosa roja en tu cama
esperando que vuelvas
Se ve el viento avivando esa llama y hasta aquí llega el calor y las chispas desde esa distancia. Dolido y hermoso el poema. Un placer este encuentro.
Un abrazo.
Pepa
Prefiero ser verbal
y no adjetiva.
Perfecta ¿para qué?
si no es amandote.
Un poema de honda dulzura, Lázaro, de cercana nostalgia, y que por momentos pide a gritos que se le ponga música para ser cantado.
Es muy meritorio escribir con tanta naturalidad y lograr tan alta tensión poética.
La ausencia disminuye las pequeñas pasiones
y aumenta las grandes, lo mismo que el viento apaga las velas y aviva las hogueras. François de la Rochefoucauld
Uno tiene la costumbre,
la mala acostumbre
de perdonárselo
todo
Y morir con el gastado vicio de creerse sus mentiras,
eso es normal
ser un tonto es normal.
A veces nos quejamos de la rudeza de afuera
o la lluvia en la ropa,
es natural que nos veamos gigantes
y sepamos también decir hola
cuando el vecino pase
y no sepamos
preparar unos espagueti a la Boloñesa
como los preparaba ella
con carne de ternera
y el rojo Cabernet Sauvignon
a la luz de la vela
y su beso
antes de la oración.
Es natural la vanidad de callarse
y disfrazar los actos como si no faltara nada
como si la pijama de corazones rojos
colgada tras la puerta
no tuviera alas
o el piano pudiera tocar solo
o enterrar bajo mis uñas
algo más que libros y muertos
o que te vea
en todas las siluetas
aferrándome a estos párpados
cerrados que pesan toneladas
por tu ausencia.
Mañana no justifico nada.. nada,
una linda rosa roja en tu cama
esperando que vuelvas.
Gitano
Hola Lazaro me gusto tu poema de nostalgia:
o que te vea
en todas las siluetas
aferrándome a estos párpados
cerrados que pesan toneladas
por tu ausencia.
Mañana no justifico nada.. nada,
una linda rosa roja en tu cama
esperando que vuelvas
Bello
Un brazo. Gabriel.
Gracias Gabriel.
abrazos.
lázaro
!Hay que ser valiente para ser poeta!
Hay que estar loco.
A la literatura, al amor y a los animales
no se les puede hacer trampas.
Josefa A. Sánchez escribió:Se ve el viento avivando esa llama y hasta aquí llega el calor y las chispas desde esa distancia. Dolido y hermoso el poema. Un placer este encuentro.
Un abrazo.
Pepa
Gracias Pepa..siempre es un honor
tenerte por acá
abrazos.
lázaro.
!Hay que ser valiente para ser poeta!
Hay que estar loco.
A la literatura, al amor y a los animales
no se les puede hacer trampas.
La ausencia disminuye las pequeñas pasiones
y aumenta las grandes, lo mismo que el viento apaga las velas y aviva las hogueras. François de la Rochefoucauld
Uno tiene la costumbre,
la mala acostumbre
de perdonárselo
todo
Y morir con el gastado vicio de creerse sus mentiras,
eso es normal
ser un tonto es normal.
A veces nos quejamos de la rudeza de afuera
o la lluvia en la ropa,
es natural que nos veamos gigantes
y sepamos también decir hola
cuando el vecino pase
y no sepamos
preparar unos espagueti a la Boloñesa
como los preparaba ella
con carne de ternera
y el rojo Cabernet Sauvignon
a la luz de la vela
y su beso
antes de la oración.
Es natural la vanidad de callarse
y disfrazar los actos como si no faltara nada
como si la pijama de corazones rojos
colgada tras la puerta
no tuviera alas
o el piano pudiera tocar solo
o enterrar bajo mis uñas
algo más que libros y muertos
o que te vea
en todas las siluetas
aferrándome a estos párpados
cerrados que pesan toneladas
por tu ausencia.
Mañana no justifico nada.. nada,
una linda rosa roja en tu cama
esperando que vuelvas.
Gitano
Llega al corazón tu poema, Lázaro.
Emociona y mucho.