NO ME GUSTAN LOS SOLILOQUIOS...
Publicado: Mar, 12 Oct 2010 17:29
No me gustan los soliloquios,
por eso canto, en voz alta
mi desconsuelo,
mi loco desconsuelo
de niño inquieto,
mi loco desconsuelo
de niño loco.
Ahora resulta que un niño de Bahamas
se ha enamorado sin querer...
de una mujercita de Singapur.
Y sus cartas son los mas hermosos
quejidos que al viento
que jamás ha lanzado nadie.
Y vuelve a ponerse de moda
¡ créetelo ¡
morir de amor.
Pero morir de verdad,
sofisticadamente, eso sí,
pero morir al fin y al cabo.
Y me hace gracia todo esto.
Quedan a una hora,
en un sitio que lo llaman “ virtual “.
Vamos, que pueden elegir
cada día un paisaje nuevo,
vamos, a voluntad.
Ayer a orillas del Nilo,
Hoy en la falda del Klimanjaro,
Mañana en las Maldivas...
Ya han quedado el domingo
en Central Park.
Y me hace gracia todo esto,
me enternece, la verdad,
un poco.
Hasta el añoso de don Fidel,
el encuadernador de Cibeles
me dice el otro día como si nada,
que anda en romances
con una tal Thaitiana,
de no se dónde me dijo que era...
de Luxemburgo, creo.
Que ha encontrado el súmun
de su existencia.
El “ sumun “ dice él.
El pobre don Fidel, sí...
el ex-cura, ex-maestro, ex-combatiente.
Me hace gracia todo esto.
Mira que he visto como cambiaba el mundo
de la noche a la mañana.
Pero esto...
Es tan...
Tan distinto.
¿ quien sabe si no me estará esperando
mi “ sumun “
en algún lugar de Indochina ¿
por eso canto, en voz alta
mi desconsuelo,
mi loco desconsuelo
de niño inquieto,
mi loco desconsuelo
de niño loco.
Ahora resulta que un niño de Bahamas
se ha enamorado sin querer...
de una mujercita de Singapur.
Y sus cartas son los mas hermosos
quejidos que al viento
que jamás ha lanzado nadie.
Y vuelve a ponerse de moda
¡ créetelo ¡
morir de amor.
Pero morir de verdad,
sofisticadamente, eso sí,
pero morir al fin y al cabo.
Y me hace gracia todo esto.
Quedan a una hora,
en un sitio que lo llaman “ virtual “.
Vamos, que pueden elegir
cada día un paisaje nuevo,
vamos, a voluntad.
Ayer a orillas del Nilo,
Hoy en la falda del Klimanjaro,
Mañana en las Maldivas...
Ya han quedado el domingo
en Central Park.
Y me hace gracia todo esto,
me enternece, la verdad,
un poco.
Hasta el añoso de don Fidel,
el encuadernador de Cibeles
me dice el otro día como si nada,
que anda en romances
con una tal Thaitiana,
de no se dónde me dijo que era...
de Luxemburgo, creo.
Que ha encontrado el súmun
de su existencia.
El “ sumun “ dice él.
El pobre don Fidel, sí...
el ex-cura, ex-maestro, ex-combatiente.
Me hace gracia todo esto.
Mira que he visto como cambiaba el mundo
de la noche a la mañana.
Pero esto...
Es tan...
Tan distinto.
¿ quien sabe si no me estará esperando
mi “ sumun “
en algún lugar de Indochina ¿