No te asomes todavía
Publicado: Vie, 10 Sep 2010 0:08
Nota: debo aclarar que este poema no sigue una regla definida de metrica o rima en si. Es un poema que asi surgió en recuerdo a mi abuela fallecida unos cuantos meses antes, y aunque no suelo ser tan complaciente con la metrica de mis versos, en esta ocasion, senti que tratar de modificarlos era quitar el sentimiento que quedó vertido en ellos cuando los escribí. Los dejo aquí, amigos y compañeros, sabiendo que seran benevolentes con su rebeldia.
Un abrazo
Javier
---
Estas tardes me recuerdan esas tardes
que cosías a las costuras de mi alma…
cuánta ternura en tus viejas pupilas
que alcanzaron a ver todo y a exigir nada!
cuánto amor se descolgaba del balcón
de tus recuerdos y del sol de tu mirada!
Tejías sueños improbables para mi
imberbe futuro en el nicho de tu mente,
si todos hicieran caso a los deseos
de una madre todos fueran presidentes
pero para este país que alienta sueños
de grandeza dos es mas que suficiente.
Estas tardes tan sumisas del invierno
citadino me duele que estés ausente
y me agoto el intelecto pretendiendo
que estoy bien, que mi corazón me miente,
que no hay nostalgia escondida en
tu ausencia, tan vacía, tan presente.
Se muy bien que haz ido al cielo
a dar a Dios tu informe de actividades,
pero sigo correteando a la tristeza en los
rincones de una que otra de estas tardes,
si te lloro es simplemente que te extraño,
si te extraño es porque has sido indispensable.
Se me agolpan los recuerdos de la infancia
que bordaste con pedazos de sonrisa,
Si supieras cuánto cuesta el no tenerte
cuando el día se hace viejo y se marchita,
cuando el sol se vuelve un cárdeno horizonte
que te invoca, que te busca, que me grita.
La tarde se vuelve noche. En mi mente
brilla el sueño que me da tu compañía
No te asomes a la estrella donde siempre
me contemplas, no te asomes todavía...
deja que me seque el llanto y que te
encienda una sonrisa… madre mia
- Javier
Un abrazo
Javier
---
Estas tardes me recuerdan esas tardes
que cosías a las costuras de mi alma…
cuánta ternura en tus viejas pupilas
que alcanzaron a ver todo y a exigir nada!
cuánto amor se descolgaba del balcón
de tus recuerdos y del sol de tu mirada!
Tejías sueños improbables para mi
imberbe futuro en el nicho de tu mente,
si todos hicieran caso a los deseos
de una madre todos fueran presidentes
pero para este país que alienta sueños
de grandeza dos es mas que suficiente.
Estas tardes tan sumisas del invierno
citadino me duele que estés ausente
y me agoto el intelecto pretendiendo
que estoy bien, que mi corazón me miente,
que no hay nostalgia escondida en
tu ausencia, tan vacía, tan presente.
Se muy bien que haz ido al cielo
a dar a Dios tu informe de actividades,
pero sigo correteando a la tristeza en los
rincones de una que otra de estas tardes,
si te lloro es simplemente que te extraño,
si te extraño es porque has sido indispensable.
Se me agolpan los recuerdos de la infancia
que bordaste con pedazos de sonrisa,
Si supieras cuánto cuesta el no tenerte
cuando el día se hace viejo y se marchita,
cuando el sol se vuelve un cárdeno horizonte
que te invoca, que te busca, que me grita.
La tarde se vuelve noche. En mi mente
brilla el sueño que me da tu compañía
No te asomes a la estrella donde siempre
me contemplas, no te asomes todavía...
deja que me seque el llanto y que te
encienda una sonrisa… madre mia
- Javier