Editorial Alaire

Tal vez tengan razón
aquellos que hacen gala
de llegar tan deprisa
como un rebato pueda
a la meta del tiempo
desesperadamente.

Nunca fui partidario
de ir contrarreloj
a mundos que no existen.

Más bien tengo en la calma
un amigo invisible
por útil aliado
para urdir estrategias
con péndulos parados.

En la luz de la noche
enhebro las palabras
con hilos de silencio.

Y aunque soy de los sueños
tranquilo transeúnte,
al menos que alguien sepa
que yo también existo

madejando los versos de un poema.



Manuel M. Barcia


http://unembrujodefuego.blogspot.com/

Imposible ignorar la existencia de alguien que escribe de esta manera.

"Nunca fui partidario
de ir contrarreloj
a mundos que no existen."

Hermoso, Manuel!

Besos.

"...
madejando los versos de un poema...."


Haremos deliciosas bufandas con ellos, abrigan, son suaves y especialmente, están tejidas por uno mismo.

Me ha venido a la mente, porque acabo de terminar un maravilloso libro El Club de los Viernes, en el que unas amigas se reúnen, con la excusa de hacer punto y todas, tejiendo y destejiendo, van deslizando sus vidas.
Como un poema.

Mis saludos mediterráneos, Manuel, y a ver si se nos pasa este horrible calor.

Aubriel Camila de la Prad escribió:Imposible ignorar la existencia de alguien que escribe de esta manera.

"Nunca fui partidario
de ir contrarreloj
a mundos que no existen."

Hermoso, Manuel!

Besos.

Me alegra mucho que te guste, Aubriel.

Muchas gracias por tu paso.

Un abrazo
Manuel

Me gustó, Manuel, sigamos tejiendo versos con la calidez de la palabra.
Un placer leerte. Abrazos.
Mario.

Y aunque soy de los sueños
tranquilo transeúnte,
al menos que alguien sepa
que yo también existo

No creo que tengas problemas para que se cumpla este deseo, Manuel. Al menos Hacienda lo sabrá...

Fuera de bromas, el poema, como es tu costumbre, con una musicalidad y coherencia muy bien urdidas.

Abrazos.

Concha Verónica Vidal escribió:"...
madejando los versos de un poema...."


Haremos deliciosas bufandas con ellos, abrigan, son suaves y especialmente, están tejidas por uno mismo.

Me ha venido a la mente, porque acabo de terminar un maravilloso libro El Club de los Viernes, en el que unas amigas se reúnen, con la excusa de hacer punto y todas, tejiendo y destejiendo, van deslizando sus vidas.
Como un poema.

Mis saludos mediterráneos, Manuel, y a ver si se nos pasa este horrible calor.

Gracias por compartir estos versos, Concha.

Un abrazo con corriente de abanico.

Mario Martínez escribió:Me gustó, Manuel, sigamos tejiendo versos con la calidez de la palabra.
Un placer leerte. Abrazos.
Mario.

Gracias por tu ovillo de existencia, Mario.

Un placer tu compañía en estos versos.

Un abrazo
Manuel