LOS CUATRO ELEMENTOS
Publicado: Mié, 04 Ago 2010 7:00
La esperanza del mundo se encierra
en los cuatro costados de los arcángeles,
en los cuatro elementos primigenios.
No había la guerra, eran desconocidas las hambrunas
y el huracán y el viento reposaban
sin derruir los frisos y relieves más antiguos.
No era el hacha, el hacha no existía
en la mano inocente del nacido;
no era la serpiente, siempre reptando,
siempre sombra en el suelo.
No eran los buques, los navíos
que llevaban esclavos de una a otra orilla
de la Mar Oceána y los encadenaban
luego
ante agudos colmillos de los canes.
No era la prostituta, que ahora ejerce
su oficio noche y día,
con un cigarrillo que la quema y destruye,
negándole por siempre la esperanza de una resurrección.
Con los cuatro elementos,
Agua, Aire, Fuego, Tierra,
podréis mirar al cielo,
subir una colina, penetrar en un bosque de hayas
y encontrar para siempre
la sublime armonía de las cosas.
en los cuatro costados de los arcángeles,
en los cuatro elementos primigenios.
No había la guerra, eran desconocidas las hambrunas
y el huracán y el viento reposaban
sin derruir los frisos y relieves más antiguos.
No era el hacha, el hacha no existía
en la mano inocente del nacido;
no era la serpiente, siempre reptando,
siempre sombra en el suelo.
No eran los buques, los navíos
que llevaban esclavos de una a otra orilla
de la Mar Oceána y los encadenaban
luego
ante agudos colmillos de los canes.
No era la prostituta, que ahora ejerce
su oficio noche y día,
con un cigarrillo que la quema y destruye,
negándole por siempre la esperanza de una resurrección.
Con los cuatro elementos,
Agua, Aire, Fuego, Tierra,
podréis mirar al cielo,
subir una colina, penetrar en un bosque de hayas
y encontrar para siempre
la sublime armonía de las cosas.