EL ÉXODO
Publicado: Mié, 21 Jul 2010 16:31
Seréis arrojados a las llanuras del desierto
donde no hay madres
ni cuerpos de esposas
que puedan protegeros de tanta amargura
y donde sólo los cráneos de los monos
crecen gigantes en la primavera.
Nadie dirá por vosotros una palabra de consuelo
ni nadie os dará una gota de agua
esa gota que el perro desprecia
y en la que el gato se orina meticulosamente.
O quizás seáis arrojados
a los vertederos de las ciudades
donde junto al huracán
que aúlla toda la noche
encontraréis pulmones destrozados
pequeños trozos de latón
fetos verticales de los recién paridos
prodigiosamente puestos de pie
cabeceras de camas
que habitaron palacios subterráneos
guardainfantes de quienes en un soto
perdieron su doncellez
túnicas negras de clérigos
encías comidas por el escorbuto
y que en su tiempo cruzaron los océanos
periódicos diarios que aún proclaman orgullosamente
los acuedos de un consejo de ministros.
Podréis elegir libremente sin que vuestra ambición
ni vuestra gloria de hombres libres
sean humilladas en los comicios.
(Quizás pueda servir para el libro colectivo.)
donde no hay madres
ni cuerpos de esposas
que puedan protegeros de tanta amargura
y donde sólo los cráneos de los monos
crecen gigantes en la primavera.
Nadie dirá por vosotros una palabra de consuelo
ni nadie os dará una gota de agua
esa gota que el perro desprecia
y en la que el gato se orina meticulosamente.
O quizás seáis arrojados
a los vertederos de las ciudades
donde junto al huracán
que aúlla toda la noche
encontraréis pulmones destrozados
pequeños trozos de latón
fetos verticales de los recién paridos
prodigiosamente puestos de pie
cabeceras de camas
que habitaron palacios subterráneos
guardainfantes de quienes en un soto
perdieron su doncellez
túnicas negras de clérigos
encías comidas por el escorbuto
y que en su tiempo cruzaron los océanos
periódicos diarios que aún proclaman orgullosamente
los acuedos de un consejo de ministros.
Podréis elegir libremente sin que vuestra ambición
ni vuestra gloria de hombres libres
sean humilladas en los comicios.
(Quizás pueda servir para el libro colectivo.)