Editorial Alaire

Alguien murió en mi calle,
normal,
pasamos a otras arcillas,
nos descomponemos en elementos simples,
desaparece la carne;
ríen y lloran los sepelios
mientras el difunto mira
y siente cómo se le enfrían los pies.

Alguien murió en mi calle
después de comprar cervezas.
Normal.
Celebraba la victoria de Ghana,
-tetas negras, como la noche de Limón-
y pasé a reflexionar, junto al cadáver helado,
cómo sabrían aquellas que no pudo beberse.

Saludé a los familiares, a la viuda,
manifesté cuánto admiraba al difunto
-maravillosas las ojeras de esa mujer,
le daban cierto aire crepuscular-
a la hermana del muerto y a sus primas.
Todas con enormes tetas
e imaginaba cómo se consumiría la carne
detrás de la silicona, ente espiritual
que supera toda materia orgánica.

¡Lo que se parecía el muerto a mí!
La misma edad, los mismos ojos negros,
los pies, las manos.
¡Seguro que tragaba tanto ron como yo!
-Murió de cirrosis, me confesó la madre-
fumaba tanto como yo,
y follaría, seguro, más que yo.

Todo, todo exactamente igual;
como los universos paralelos
en la mística de San Tomás Quintín.
Pensaba en la viuda:
¿cómo olerá la flor de Eva
después de tres días sin auxilio?
¿Y la hermana del muerto
que ya sentía como de mi familia?
Pensé en el bello y redentor incesto
y en los nueve días de cocina Tántrica,
necesarios para cruzar el Aqueronte.

Pero lo único, lo único
que me diferencia de ese cabrón
es la cantidad de gente que vendrá a su entierro
-sólo para ver a la joven viuda-
mientras yo, un solitario poeta
que nunca escribió un verso decente,
repleto de adelfas y abismos antes de morir,
no tendré siquiera una misa de Réquiem
ni ataúd posible que me sostenga
en el último río.

san armilo b.

Ohhh, audaz, poesía audaz, magnífica. Armilo me tragué cada verso absolutamente expectante, una narrativa mordaz y arrebatadora.
Me encantó!!!
Felicitaciones, y vamos por más!

Armilo, comno dice Daniela, es un poema audaz, de los que te remueven y no te deja indiferente. Un poema sobre un muerto que canta a la vida, y con tanta ironía dentro... Estupendo, de verdad.

Abrazos.

Ohhhhhhhh, extraordinario!!!!! Me los he bebido sin respirar. Ritmo, fuerzaaaa y talento que desbordan.

Aplausos, Armilo poeta y un beso grande!!!

Hallie

Es un poema que se lee de un tirón en busca del final. Me gustó, tiene sentido e ironía.
Abrazos
Pilar

Interesante historia y muy bien contada por cierto. La he disfrutado. Un abrazo.

Daniela Miño escribió:Ohhh, audaz, poesía audaz, magnífica. Armilo me tragué cada verso absolutamente expectante, una narrativa mordaz y arrebatadora.
Me encantó!!!
Felicitaciones, y vamos por más!

Audaz es usted poeta que no se inmuta en leer mis palabras que yo siento lejanas a la lírica perosí muy sinceras.

De veras que la admiro.

san armilo b.

Juan Fionello escribió:Armilo, comno dice Daniela, es un poema audaz, de los que te remueven y no te deja indiferente. Un poema sobre un muerto que canta a la vida, y con tanta ironía dentro... Estupendo, de verdad.

Abrazos.

Sí Juan, es un muerto que canta a la vida desde dentro. Y escribe versos sobre los muertos sus compañeros de oficina.

Un abrazo amigo.

san armilo b.

Wow! Armilo, es alucinante.
Me encantan las imágenes y en tu poema se suceden y crecen, se transforman ... un poemazo!

Besos.

Hallie Hernández Alfaro escribió:Ohhhhhhhh, extraordinario!!!!! Me los he bebido sin respirar. Ritmo, fuerzaaaa y talento que desbordan.

Aplausos, Armilo poeta y un beso grande!!!

Hallie

Tu piel poética, siempre el mejor vino que uno pueda beber a la caída del sol.

Un beso amiga.

san armilo b.

Pilar Morte escribió:Es un poema que se lee de un tirón en busca del final. Me gustó, tiene sentido e ironía.
Abrazos
Pilar

Gracias Pilar, siempre estás ahí animando.

Un beso

san armilo b.

Tu manera de hacernos pensar en la vida tiene mucha más miga de la que a simple vista pueda parecer... Al final morimos como vivimos, o eso dicen, y es muy sabio por tu parte entenderlo y contarlo tan bien... Me gustó, ya sabes que me encanta tu manera original de hacer poesía...

Abrazote,

Carmen

Ramón Carballal escribió:Interesante historia y muy bien contada por cierto. La he disfrutado. Un abrazo.

Gracias Ramón por tus palabras.
Un abrazo.

san armilo b.

Hola Armilio.
La historia entre el verso y la prosa poética está bien contada, amigo mío, es valiente, irónica y ciertamente engancha hasta su final.
Un placer leerte.
Abrazos.
Mario.

San Armilo, que de santo te pasas... ¿sabes qu me ha parecido estar leyendo a García Márquez'
Oye, tal que si estuviera en Macondo y me ha gustado, la verdad.

Mis saludos mediterráneos, como siempre .