Esas tardes grises.
Publicado: Mié, 19 May 2010 3:59
Era un amante de la lluvia lo ponía triste,
Alegre o salvaje, imprevisibles sus cambios.
En los meses de lluvia siempre jugábamos
debajo de ella. Amándonos en los resquicios
de las puertas. Después tiritando yo lo miraba
encontraba en sus Ojos la ternura,
nos sentíamos tan amantes, tan nuestros
jamás esa emoción de mi mente se ha borrado
Solamente comparable con la dicha de que tu
Anidabas en mí, Tu padre y yo fuimos felices
adivinando en las nubes, en el cielo azul
el color de tus ojos, de tu faz, de tu pelo,
de tú risa. Evoco los días de campo en el bosque
los días nadando, bronceando nuestros cuerpos
sé lo perdidamente feliz que fui, hoy que no te tengo a la lluvia
Escribo miles de veces, lo repito, lo borro, lo rompo
y a escribir vuelvo, sin que nada me conforme.
El sentimiento de vació es total, la soledad me desgarra
Me destruyen esas tardes grises, sentada, en mis recuerdos, perdida
en mis recuerdos. ¿Hago lo correcto, no es mejor ser ballena,
suicidio colectivo? Como explicarte este mundo
donde los niños mueren de hambre.
Siempre pensamos llevarte al mar, que tus piecitos se deslizaran
en la arena al contacto con el agua salina
¿conocerás el mar hijo mió te traeré al mundo sólo, por ver tu sonrisa?
¿Se me partirá el corazón por acariciarte y sentir crecer este amor en capullo?
¿Me reiré de tus primer paso tambaleante,
de tus iniciales gorgoteos, de tus sonidos guturales
muy parecidos a papá ?, ¿no volverá mi dolor incalculable?
mi hoy odio, por la lluvia, por la música, por la alegría, ¿ no te contagiare?
Doliéndome las parejas de amor, por su irresponsabilidad de ser felices
Como seguir dándote vida en mis entrañas, si cada día muero,
por tu padre, desde su muerte, herido, por ladrones, por quitarle
unos cuantos pesos, mientras lo esperábamos. Yo mirando a través
de la ventana y tu feliz, moviéndote… dándo patadas, dentro de mi vientre.
Alegre o salvaje, imprevisibles sus cambios.
En los meses de lluvia siempre jugábamos
debajo de ella. Amándonos en los resquicios
de las puertas. Después tiritando yo lo miraba
encontraba en sus Ojos la ternura,
nos sentíamos tan amantes, tan nuestros
jamás esa emoción de mi mente se ha borrado
Solamente comparable con la dicha de que tu
Anidabas en mí, Tu padre y yo fuimos felices
adivinando en las nubes, en el cielo azul
el color de tus ojos, de tu faz, de tu pelo,
de tú risa. Evoco los días de campo en el bosque
los días nadando, bronceando nuestros cuerpos
sé lo perdidamente feliz que fui, hoy que no te tengo a la lluvia
Escribo miles de veces, lo repito, lo borro, lo rompo
y a escribir vuelvo, sin que nada me conforme.
El sentimiento de vació es total, la soledad me desgarra
Me destruyen esas tardes grises, sentada, en mis recuerdos, perdida
en mis recuerdos. ¿Hago lo correcto, no es mejor ser ballena,
suicidio colectivo? Como explicarte este mundo
donde los niños mueren de hambre.
Siempre pensamos llevarte al mar, que tus piecitos se deslizaran
en la arena al contacto con el agua salina
¿conocerás el mar hijo mió te traeré al mundo sólo, por ver tu sonrisa?
¿Se me partirá el corazón por acariciarte y sentir crecer este amor en capullo?
¿Me reiré de tus primer paso tambaleante,
de tus iniciales gorgoteos, de tus sonidos guturales
muy parecidos a papá ?, ¿no volverá mi dolor incalculable?
mi hoy odio, por la lluvia, por la música, por la alegría, ¿ no te contagiare?
Doliéndome las parejas de amor, por su irresponsabilidad de ser felices
Como seguir dándote vida en mis entrañas, si cada día muero,
por tu padre, desde su muerte, herido, por ladrones, por quitarle
unos cuantos pesos, mientras lo esperábamos. Yo mirando a través
de la ventana y tu feliz, moviéndote… dándo patadas, dentro de mi vientre.