Editorial Alaire

Traduzco los besos de perrode las sombras de mis sueños:
Recuerdo el decorado,las calles empedradasy los vetustos edificios medievales.
Paseábamos juntos por el centro,la luz se ocultaba tras el manto de nubes.
Te hablaba de ella, de su cuerpo desnudo esperando en el sofá,qué hermosa es-te decía-su piernas largas,su pecho adornado con los lunaresmás intrigantes del firmamento,su prodigioso pelo rizado.
Te iluminabas,mirabas con los ojos del ángel,descubrías los dientes blancos y afilados.
Entramos en la catedral, se oficiaba misa,te revelaste como el que erasy ardieron hombres y mujeres.
Perdí la oportunidad de hablarte,el terror más primitivo me oprimió las entrañasy desperté.

Despertaste en el momento oportuno, menos mal, bueno nunca se sabe como puede terminar un sueño.
Un gusto seguir estos versos
Abrazos
Pilar

Israel. el comienzo es bestial, verdaderamente bueno, nos pone en guardia para ver qué se esconde tras los dos puntos.

Y lo que se esconde tiene de todo, dulzura, encanto, temor, y el propio Diablo.

Excelente, de principio a fin.

Un abrazo.

La tentación y el diablo siempre van de la mano en nuestra cultura judeo-cristiana... no sé yo si el diablo somos nosotros mismos en una faceta que no queremos (o no sabemos) ver.

Disfruté del poema. Un cordial saludo.

Pilar Morte escribió:Despertaste en el momento oportuno, menos mal, bueno nunca se sabe como puede terminar un sueño.
Un gusto seguir estos versos
Abrazos
Pilar

Gracias por pasarte Pilar, un abrazo

Juan Fionello escribió:Israel. el comienzo es bestial, verdaderamente bueno, nos pone en guardia para ver qué se esconde tras los dos puntos.

Y lo que se esconde tiene de todo, dulzura, encanto, temor, y el propio Diablo.

Excelente, de principio a fin.

Un abrazo.

Muchas gracias Juan, un abrazo.

Un poema que crea cierto desasosiego. Y lo crea porque llega y está bien escrito.
Conduces la trama con maestría y el final me parece acertado y perfecto.
Un abrazo, amigo Israel.
J. Manuel