Editorial Alaire

Después de tantos años, somos de aquí
sólo el aire denso de un laberinto,
vemos atardecer con los ojos cerrados,
escribimos en la pared un nombre,
una fecha y una historia
para finalmente no decir nada.

Después de tantos años
seguimos fingiendo que esto es mentira.

Te observo ahora en esa portada del cd
de McDonald y Giles
donde tú no estás, donde no soy nadie,
donde la música pregunta
si ella continúa pintando el mar
del mismo modo en el que
desde esa ventana del ala rota
y el árbol distante como tus ojos
seguimos fingiendo que no es así.

Quizá nunca sepamos dónde está la verdad
—esa costa oculta a todos los mares—,
quizá nada de esto sea fingido
y regresaré a casa, otra vez, en la noche
con las venas abiertas.

No sé qué más puedo decirte,
tal vez sólo que tú eres cada tarde
el nombre, sin adjetivos, el nombre
bajo la lluvia, veinte años antes de siempre.

"No sé qué más puedo decirte,
tal vez sólo que tú eres cada tarde
el nombre, sin adjetivos, el nombre
bajo la lluvia, veinte años antes de siempre. "

Este final es precioso, enrique. Me ha costado un par de lágrimas (de esas que nos certifican como entes vivos y abiertos a la locura de sentir)

Aplausos y felicitaciones!!!!!!!

Hallie

Quizá nunca sepamos dónde está la verdad
—esa costa oculta a todos los mares—,
quizá nada de esto sea fingido
y regresaré a casa, otra vez, en la noche
con las venas abiertas.

Un gran poema, Enrique, con un toque melancólico que se queda agarrado a los ojos al leerlo.

Me ha gustado.

Un cordial saludo.

Muy agradecido, Hallie, por tu paso y por tu felicitación tan efusiva.

Un cordial saludo.

Tus poemas nos cuentan siempre preciosas historias, Enrique... Me gusta mucho todo lo que sugiere tu poesía...

Un placer,

Carmen

Un poema que derrama gran sentimiento y escrito con extrema sensibilidad. Me ha gustado mucho este excelente trabajo. Mi enhorabuena Enrique.
Un abrazo.
J. Manuel

Gracias por la sensibilidad y ese agarre en tus ojos, Juan.

Un cordial saludo.

Me alegra que te gustara esta historia, Carmen.

Muchas gracias y un cordial saludo.

Un poema que me ha hecho volar por vientos ineludibles y luego posarme con la mano en la roca, como si tuviera veinte años, Enrique, qué precioso, poeta. Un abrazo



Spin

Muy agradecido, José Manuel, por el calor de tus palabras.

Otro abrazo fuerte para ti.

Gracias por volar conmigo, Lourdes, a lomos de estas letras.

Un abrazo.

Me gustó tu poema, tiene un aroma que penetra el sentimiento. Un placer seguirte
Abrazos
Pilar

Gracias por degustar ese aroma, Pilar.

Es un placer contar con tu presencia por aquí. Un abrazo.