Editorial Alaire

Amigos:
Vuestros comentarios merecen sin duda el que yo los conteste de manera individual, pero está aún muy reciente el desagradable incidente de mi corazón y no puedo con mi alma, me canso mucho.
Os agradezco mucho vuestros deseos de restablecimiento que me han servido para sentirme apoyado en estos momentos en los que resulta tan necesario elevar la moral, porque está por los suelos. Muchos de vuestros mensajes son entrañables, algunos me han emocionado. MUCHÍSIMAS GRACIAS.
En relación con el poema, es para mí una enorme satisfacción sentir que os ha gustado, en muchos casos muchísimo, vuestros comentarios son de una enorme amabilidad y generosidad con mi obra. Muchas gracias de corazón.
Os dejo a todos un abrazo muy fuerte, con la esperanza de poder regresar en un futuro a este foro, ya restablecido de mi dolencia.

Descubrí tarde este poema, pero me encantó.
Felicidades, Manuel, y un placer haber venido.
Saludos.

Hola Manuel, ahora que ya estás un poco mejor y que has tenido fuerza para venir a dar las gracias a los compañeros, vengo otra vez para felicitarte por el reconocimiento muy merecido. Vengo a decirte que te cuides para que puedas volver pronto, porque como ves nos gusta leerte y porque a Rosario y a mí nos encantan tus letras azules.
Un beso, amigo.

Te deseo una pronta recuperación, Manuel, y enhorabuena por el merecido reconocimiento a tu obra.

Cuídate, amigo.

Un abrazo.

Subo este poema de Manuel Sánchez para disfrute de todos.

Manuel Sánchez escribió: ↑Mar, 11 Feb 2020 16:41 Hay días que mi madre decide no estar muerta
y se sienta a mi lado
a escuchar como crece lo nuestro en los relojes,
a ocupar esa silla
en la que el universo ha dejado mi aspecto repleto de destino.
De qué sirve seguir
el ritmo de una huella
si al final el azar
mezcla todos los pasos.

La escucho:
--que tus poemas sepan encontrarte
y usurpen como gritos lo que no has de decir.
No te fíes de ti, tú ya no eres el niño que salió de mi vida.

Luego enciende una vela
y dice que se ve mejor a oscuras.

La soledad se ocupa de guardarnos el sitio,
de llamar a la historia, realidad.
Los años tienen miedo de ser acorralados.

No te dejes la barba, me susurra,
te hace un niño mayor de lo que eres,
y los niños mayores
se pasan todo el tiempo
recorriendo la infancia.

Hay días que mi madre se pregunta por mí.

Agradezco tu poema con toda mi alma.
Tengo muchas deudas con la memoria de mi madre.

Fonda aperta.