El hombre que leía a Cátulo

[Carmen Pla]

.
. "Ese poeta sonríe demasiado"
(Ramón Ataz)



El hombre que leía a Cátulo



El hombre está en un banco,
el banco está en un parque;
cerca juega una niña,
al lado dormita un perro.

El sonríe, suspira,
su mirada se pierde en un sitio muy dentro
allá tras la mirada,

En su mano está el libro.
También el libro sonríe,
aletea,
se expande.
El hombre está en el libro, aunque no lo sabe;
el libro está en el hombre,
aunque ambos lo ignoran,
la niña crece dentro de todo ello
mientras hablan los árboles
y la hierba verdece.

Solo una sombra,
lejana
inaprehensible

planea sobre ellos.




-A Ramón, siempre tan persona.


Pepa

Encantador poema, Pepa.
Me ha gustado el juego de palabras.
Un abrazo cordial.

[Guillermo Cumar.]

Ramón sigue en ti, contigo y con nosotros.Con la lírica de Cátulo también.

Un abrazo y paz, paz, paz...

[Armilo Brotón]

Recordar a la gente es mantenerlos vivos. Agradecer lo buenos momentos que nos han proporcionado y seguir degustando sus palabras.

Recibe un cordial saludo.

[Ricardo Serna G]

Josefa


Estilo y tema especial
Belleza plena


Te felicito



Un abrazo fuerte, querida amiga

[E. R. Aristy]

.
. "Ese poeta sonríe demasiado"
(Ramón Ataz)



El hombre que leía a Cátulo



El hombre está en un banco,
el banco está en un parque;
cerca juega una niña,
al lado dormita un perro.

El sonríe, suspira,
su mirada se pierde en un sitio muy dentro
allá tras la mirada,

En su mano está el libro.
También el libro sonríe,
aletea,
se expande.
El hombre está en el libro, aunque no lo sabe;
el libro está en el hombre,
aunque ambos lo ignoran,
la niña crece dentro de todo ello
mientras hablan los árboles
y la hierba verdece.

Solo una sombra,
lejana
inaprehensible

planea sobre ellos.




-A Ramón, siempre tan persona.


Pepa

Maravilloso poema en múltiples dimensiones. Es una obra excepcionalmente bella y celebra la gran parte que conocimos de Ramón Ataz, el aventurero Fionello, como yo llegue a imaginármelo un día cuando leí a su poema Mujer sobre una roca, disculpa si no recuerdo exactamente el titulo. Un lujo leerte, Pepa. ERA

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Carmen, casi un año después, por la deferncia que tuviste de leer y dejar un comentario amable.
Un abrazo.
Pepa

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Guillermo, por dejar tu amable huella. Si, ahí sigue.
Un abrazo.
Pepa

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Armilo, por el acertado comentario. La verdadera inmortalidad es la memoria de los que nos sobreviven. Un placer tu visita.
Un abrazo.
Pepa

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Ricardo, por dejar una palabra amable y esperar tanto tiempo la respuesta.

Gracias, E.R.A, por tu mirada cercana y profunda lectura de estas humildes letras.

Un abrazo.
Pepa

[E. R. Aristy]

He venido a este poema que vuela en las mentes y corazones tomando vida propia. He regresado gracias a que El hombre que leía a Cátulo, es una mujer también. Sin muchas pretensiones, Pepa, llevas la bandera blanca de la poesía, vas sobre un corcel sin tiempo. Me alegra que Ignacio Mincholed creara un universo ético y estético donde su arte convida a otras artistas. Recibe un abrazo grande, querida Pepa.

[Josefa A. Sánchez]

Gracias otra vez, ERA, por volver sobre estos versos que Ignacio tuvo el detalle de resucitar en la maravillosa voz de Ana Arcediano. Un lujo tu insistencia en mis letras.
Un abrazo.
Pepa

[Pablo Rodríguez Cantos]

Muy interesante la construcción de este poema. Saludos.

[J. J. Martínez Ferreiro]

Vuelvo a este Gran Reserva para degustarlo una y otra vez hasta emborracharse mucho y bien, pues es un licor mágico inagotable que cuanto se bebe más se reproduce.

Rotunda obra maestra.

Nos vemos el viernes, Pepiña. Tengo de ganas de daros un fuerte abrazo.

Un pequeño gran bico.

[J. J. Martínez Ferreiro]

Un gran reserva de Alaire. Para ir disfrutando en el 12 aniversario.

Un bico, Pepa.

[Valle Oncina]

Me ha gustado mucho el poema, tan sencillo y eficaz, es una imagen pincelada con mucho gusto.

Saludos.