Editorial Alaire

Concha Vidal escribió:¡ Cuánto tiempo ha pasado verdad ?

¿Qué sientes al leer de nuevo lo escrito con tanta anterioridad?
Es buena la respuesta, porque te miras un poco a los adentros.

Abrazos marinos.

Josefa A. Sánchez escribió:Afortunado rescate el de estos versos de excelente calidad. Un gusto la lectura.
Un abrazo.
Pepa

Ramón Castro Méndez escribió:Un muy buen y muy bello poema, cuando todo se acaba y llega el desencuentro. Me ha encantado leerte.
Un abrazo.

Alejandro Costa escribió:¿Y yo que te comento?

Simple, ¡Genial!

Y un fuerte abrazo.

Marimar González escribió:¡Qué sorpresa encontrar la entrada del camino! Recuerdo que descubrí tu verso caminando en claroscuro por una ciudad casi onírica. Cruzo la puerta y a seguirte, pues, por ese paisaje interno que uno va descubriendo a través de luces parpadeantes. Muy bello.
Marimar1

xaime oroza carballo escribió:Non o tiña lido antes. Grandioso, sobre todo o remate cos tres derradeiros versos: "Cuando el crepúsculo llegue fiel a su cita, un resplandor de olvido se hundirá como el eco y ese orgullo latente y mudo, dejará por fin de ser nuestro."
Unha aperta

Ramón Carballal escribió:ES MI PRESENTACIÓN EN ESTE FORO Y ANTES DE NADA QUIERO MANDAROS UN SALUDO. A ALGUNOS YA OS CONOZCO(Y ADMIRO). ESPERO NO DESENTONAR Y APORTAR MI PEQUEÑO GRANITO DE ARENA
AL BUEN FUNCIONAMIENTO DE ESTE LUGAR DE ENCUENTRO ENTRE POETAS. PONGO ESTE POEMA QUE YA TIENE ALGÚN TIEMPO.


SEPARACIÓN

Aquella vez no fue un mero desacuerdo,
una palabra que suena distinta en cada tono,
un gesto equivoco ante el espejo del baño.
No, aquella vez fue el pensamiento, la raíz
del discurso que a diario sosiega, el bálsamo
de los cajones poblados y las estanterías a medias
lo que se quebró de cuajo y en su centro.
Ya no hablaste más, pues ninguna verdad quedaba en pie.
Todo pisado, todo sucio como un camino de barro.
Amor que te has ido desnudando como un árbol en otoño
o una retama blanca de invierno, amor de nubes oscuras
y viento iracundo, ya no digas más lo siento.
Cuando el crepúsculo llegue fiel a su cita,
un resplandor de olvido se hundirá como el eco
y ese orgullo latente y mudo, dejará por fin de ser nuestro.