Editorial Alaire

Carmina Martínez escribió: ↑Jue, 03 Mar 2022 19:23 Un poema muy profundo y conmovedor, un saludo.

Javier Bustamante escribió: ↑Jue, 03 Mar 2022 21:51 Merecidisimo reconocimiento a tu poema, Francisco. Un gusto leer estos trozos de inspiración que atrapan igual que el poema dedicado a Rafel que te comenté recientemente.

Saludos

Javier

Francisco Lobo escribió: ↑Dom, 13 Feb 2022 18:51 La inocencia perdida
es lo que eché de menos estos años.
La inocencia y la vida no me hablaron
de la frontera última.
La crucé, yo estuve allí, más allá
del camino y mis pasos.
Entré tocado por el ala del ángel del acabamiento
cuando el caballo me clavaba duras espuelas.
Me apresuré en las sombras
contemplado por dos generaciones mías,
prestas con sus ramos de rosas y crisantemos
en jubiloso amor a recibirme.
A cada paso descubrí mármoles amarrados al abandono,
lirios tronchados en el llanto y solitarios árboles
con ramas desnudas como huesos estirados hacia un largo bostezo.
Caminé penetrando el más oscuro silencio
en tanto sentía tumbas abrirse bajo mis pies.
Con afán excavado en la marmórea
ciudad de los huesos umbrosos,
bajo las lívidas cortinas de mis pestañas
sentí el cansancio innumerable que derramaba mi carne,
y el peso de la droga,
y el silencio del cementerio, y la soledad,
de la que sé más que todos esos muertos.
Se me incendió el corazón,
y un inocente niño, que era yo, me regresó de la mano.

xaime oroza carballo escribió: ↑Dom, 06 Mar 2022 1:55

Francisco Lobo escribió: ↑Dom, 13 Feb 2022 18:51 La inocencia perdida
es lo que eché de menos estos años.
La inocencia y la vida no me hablaron
de la frontera última.
La crucé, yo estuve allí, más allá
del camino y mis pasos.
Entré tocado por el ala del ángel del acabamiento
cuando el caballo me clavaba duras espuelas.
Me apresuré en las sombras
contemplado por dos generaciones mías,
prestas con sus ramos de rosas y crisantemos
en jubiloso amor a recibirme.
A cada paso descubrí mármoles amarrados al abandono,
lirios tronchados en el llanto y solitarios árboles
con ramas desnudas como huesos estirados hacia un largo bostezo.
Caminé penetrando el más oscuro silencio
en tanto sentía tumbas abrirse bajo mis pies.
Con afán excavado en la marmórea
ciudad de los huesos umbrosos,
bajo las lívidas cortinas de mis pestañas
sentí el cansancio innumerable que derramaba mi carne,
y el peso de la droga,
y el silencio del cementerio, y la soledad,
de la que sé más que todos esos muertos.
Se me incendió el corazón,
y un inocente niño, que era yo, me regresó de la mano.

Enorme el poema, estremecedor el verso final.
Gracias, compañero. Merecidísimo el reconocimiento. Felicidades.
Un abrazo.

Hallie Hernández Alfaro escribió: ↑Sab, 27 Ago 2022 8:23 ,

Sube para deleite de todos.

Salud y felicidad, querido poeta.

Jerónimo Muñoz escribió: ↑Lun, 29 Ago 2022 17:02 Me acusan de prodigar los elogios, pero no. Mis comentarios negativos son, o bien los que no hago por desagrado o bien los que corresponden a lo que no he leído, y entonces no son negativos.
Este sí que lo he leído y me ha dejado asombrado. Eres de lo mejor del foro y de lo mejor de la poesía española. Eres un maestro y yo me siento muy feliz de contar con tu amistad y de poder leerte.
Un fuerte abrazo, Paco.

Jerónimo

Mirta Elena Tessio escribió: ↑Mar, 30 Ago 2022 7:25 Me encanta este poema nostálgico y tierno, algunos de tus versos me recuarda a mis vivencia,
Te dejo mi abrazo de siempre y flores por la mensión más que merecida.

Ricardo López Castro escribió: ↑Dom, 28 Ago 2022 18:38 Me ha encantado, amigo Francisco.
Libre y circular.
Menudo vuelo te has marcado.
Felicitaciones a ti y al homenajeado, amigo Ferreiro.
Abrazos y felicidad a montones.