Editorial Alaire

Isabel Rodríguez escribió:"No te envilezcas / en el inútil trato de los días..." Un arranque magistral para un poema que mantiene a lo largo de todo su desarrollo ese pulso, esa altura, para rematar con otro verso memorable por su lapidaria sencillez. "Que Ítaca siempre en ti sea presente".
Es una hermosa interpretación del poema de Cavafis, del mito de Ítaca, y logra un tono
de peculiar clasicismo especialmente atractivo.
Estupendo, realmente.
Bicos. Y salud, poeta.

Just Gafar escribió:Como una lanza de verbo, esta palabra en mi pecho, amigo Ferreiro. Más en esta nueva ciudad, ajena a mis recuerdos.

Abrazos y muchas gracias por compartir.

Rafel Calle escribió:Bellísimo poema de Ferreiro.

Josefa A. Sánchez escribió:Que siempre tengamos un destino que justifique lo proceloso del viaje. Un placer leerte.
Un abrazo.
Pepa

Gerardo Mont escribió:Este bello poema, llega y queda temblando en el alma. Viajamos a veces sin ver por las ventanas y ya que no hay regreso, deberíamos atesorar cuanto se pueda en la retina...El mismo viaje es el sentido... La escuela, digo yo convencido de un viaje subsiguiente y sin fin...De aplausos. Mis abrazos de amigo.

ROBERTO LÓPEZ escribió:

J. J. M. Ferreiro escribió:“Pide que el camino sea largo….
con avidez aprende de los sabios…
Que Ítaca siempre en ti sea presente”
Del poema “Ítaca” de Constantino Cavafis.

Un poema sereno, clásico, como un templo antiguo. Abrazos.

F. Enrique escribió:Siempre que exista un sueño, habrá una Ítaca oculta, aunque Penélope dejó de esperar hace mucho tiempo. Nos haces partícipes de un viaje, J.M.M., que, quizás, nos lleve al abismo, pero viajar es vivir, y nadie puede apartar los peligros del camino, pero, como muy bien dices; "Ten firmeza ante lo desconocido." Consigues con tu verso recio en una búsqueda constante de la metáfora la textura de los clásicos. Muy bueno.

Un abrazo.

J. J. M. Ferreiro escribió:“Pide que el camino sea largo….
con avidez aprende de los sabios…
Que Ítaca siempre en ti sea presente”
Del poema “Ítaca” de Constantino Cavafis.

No te envilezcas
en la querencia fútil de los días,
el viaje es el pulso de tu deslumbramiento.
En sus cauces discurre
el brío de las horas.

¿Por qué la angustia,
el terror elocuente de los labios
ante la extraña condición?
¿Acaso el alma
divagará en desgracia por esos derroteros?
¿Quizá nos golpee el abismo
con la nada absoluta de su hielo?

Acércate en la sombra
a la expansión de tu viaje.
Ten firmeza ante lo desconocido.

Que Ítaca siempre en ti
sea presente.