Re: El sol había muerto
Publicado: Dom, 22 May 2022 12:41
"E. R. Aristy"
José Manuel F. Febles"
EL SOL HABÍA MUERTO,
ME ABANDONO A SU SOMBRA
Una turba de cuervos bailando entre las nubes
en medio del relámpago y la lluvia,
un barrunto secreto se vislumbra,
quedando la miseria y las cenizas
en la tierra silente del paisaje.
No le vale a la muerte la escapada,
no existirán horizontes de niebla,
ni tampoco ecuménicos milagros
en el exacto plazo de esta cita.
Un dolor en el rostro me transpone,
será mía la noche para llorar a solas
y tendré entre mis manos, hambrientas y nocturnas,
un refugio sin rumbo, sin alma y silencioso,
esperando llegar
como un bando de peces a morir en la orilla.
En la calle desierta y atracada
de tus pasos ligeros, déjame que me llene
gota a gota en las charcas de la noche.
En el desasosiego de mis manos vacías,
viviendo entre las ruinas de mi aliento,
y en la vida negada, desde entonces,
entregaré mi andar al último camino.
Quisiera golpear vocabularios
con letras desveladas de locura,
esperando una fecha en la mirada
de todos los dolores que he pasado,
que ya no existen.
El sol había muerto, me abandono a su sombra.
[/quote]
Un poema esplendoroso al dolor existencial. Tu brillo de poeta marca las doce, hay que buscar la sombra de un árbol y leerte en una sumersión luminosa. ¡Te felicito, Jose Manuel Febles! Abrazos,
Mi querida Aristy, no tengo palabnras para agradecer tan brillante comentario, que no merezco,. Solamente puedo darte las gracias desde el alma-real autenticidad-, y enviarte desde la soledad de mi isla, el más grande anbrazo.
José Manuel F. Febles
José Manuel F. Febles"
EL SOL HABÍA MUERTO,
ME ABANDONO A SU SOMBRA
Una turba de cuervos bailando entre las nubes
en medio del relámpago y la lluvia,
un barrunto secreto se vislumbra,
quedando la miseria y las cenizas
en la tierra silente del paisaje.
No le vale a la muerte la escapada,
no existirán horizontes de niebla,
ni tampoco ecuménicos milagros
en el exacto plazo de esta cita.
Un dolor en el rostro me transpone,
será mía la noche para llorar a solas
y tendré entre mis manos, hambrientas y nocturnas,
un refugio sin rumbo, sin alma y silencioso,
esperando llegar
como un bando de peces a morir en la orilla.
En la calle desierta y atracada
de tus pasos ligeros, déjame que me llene
gota a gota en las charcas de la noche.
En el desasosiego de mis manos vacías,
viviendo entre las ruinas de mi aliento,
y en la vida negada, desde entonces,
entregaré mi andar al último camino.
Quisiera golpear vocabularios
con letras desveladas de locura,
esperando una fecha en la mirada
de todos los dolores que he pasado,
que ya no existen.
El sol había muerto, me abandono a su sombra.
[/quote]
Un poema esplendoroso al dolor existencial. Tu brillo de poeta marca las doce, hay que buscar la sombra de un árbol y leerte en una sumersión luminosa. ¡Te felicito, Jose Manuel Febles! Abrazos,
Mi querida Aristy, no tengo palabnras para agradecer tan brillante comentario, que no merezco,. Solamente puedo darte las gracias desde el alma-real autenticidad-, y enviarte desde la soledad de mi isla, el más grande anbrazo.
José Manuel F. Febles