Pues si llegan los pepes, que el pedrusco mejor caiga en la Moncloa . Y sí, Ana, soñar es sano, y los sueños, realmente curiosos...Ana García escribió:Todo a su tiempo, Luis. No hace falta que tientes a la suerte, que lo mismo llegan juntos las piedras y los pepes. Y la liamos parda. Soñar es sano, aunque tengan piernas kilométricas. Aparquemos los políticos que hoy por hoy ya tenemos bastante con el Covid.
Me ha gustado la mezcla de tu poema.
Un beso.
Gracias, amiga. Otro beso de vuelta.