Hallie Hernández Alfaro escribió:Caminando por Recoleta en Buenos Aires, encontré un lugar poblado de muñecas de tela, apiladas en su destino de arte y polos opuestos.
A ellas, con temblor y homenaje.
Vuelves a la plaza con tiniebla en los pechos,
de rodillas ante el sol moribundo;
con la sonrisa de los elegidos
persuades al dolor para que no salte a tus pies,
redimes al hombre con tu vientre de tela
y cortas el pan para aquellos que muestran su desnudez cartesiana.
En las madrugadas te acomodas entre las sombras bélicas,
mueves tu pelo de hilo castaño
y el pulso bipolar enseña los dientes de infancia rota.
Vuelves a la plaza para surcar los corazones incrédulos
con los ojos húmedos de pasión borgiana;
se han marchado todos
y las nubes grises absuelven...el llanto de tus genes.
Hallie
Hermoso poema Hallie. Tenés un gran talento para escribir, en cada verso se nota tu capacidad. Este poema es realmente bellísimo desde esos primeros versos que nos sitúan en un lugar entre melancólico y lugubre, hasta el final que golpea.
Me ha encantado Hallie, como todo lo que escribis.
Te mando un abrazo grande.
¨¿Quien, si yo gritara, me oiría desde la jerarquía de los angeles? R. M. Rilke