J. J. Martínez Ferreiro escribió:I
En el origen de la piedra el tiempo crea su bullicio.
De la piedra fecunda,
de donde emana la quietud de las cosas.
II
Nutre un halcón el corazón del mundo,
de ahí ese crescendo en la velocidad,
después, aunque no la veamos,
ensangrentada, la paloma desaparece.
Esta es la escena que reflejan los ojos de los ahogados.
III
Rasgad las nubes y pulsad la lluvia,
saboread
el barro de las tierras movedizas,
así se forja el corazón del ángel.
IV
He aquí el poema,
tal vez la palidez del esqueleto universal
que en un ensanchamiento de claveles
en todo instante me fascina,
porque en otra manera, forma o símbolo
¿A qué otro fascinaría?
Oh, rodaje, inaprensible vuelo! Nos dejas las potentes imagenes de la moción de las cosas. Nos dejas el silencio y la desaparición de las cosas. Nos instas a tomar iniciativa propia:
"Rasgad las nubes y pulsad la lluvia,
saboread
el barro de las tierras movedizas,
así se forja el corazón del ángel."
Aprovechar el día , estar presente hoy. Me dejas satisfecha, Ferreiro. Una obra de arte inspirada e inspiradora. Fascinada contigo, poeta. ERA