Editorial Alaire

Pienso que este poema representa una de las cualidades emblemáticas de tu estética. Contiene imágenes sorprendentes y metáforas paradojales muy acertadas, cuya raíz se encuentra --según mi percepción--, en el surrealismo, en la costumbre de lidiar con la intuición, con la fantasía de la mente sedienta de poesía pura, con esa necesidad de hurgar más allá de lo convencional. Indudablemente, estamos frente a un poema granítico en su mensaje, sin dudas ni rodeos, y con mucha virtud rítmica. A mí el poema no me ha parecido largo; por el contrario, la ausencia absoluta de ripio y la fuerza lírica de los versos que no cede hasta el final, hacen que la lectura envuelva al lector y lo de satisfecho y emocionado. Quiero agregar diciendo --a título personal-- que este trabajo tuyo me trasmite aprendizaje en el campo de la poesía, lo cual yo valoro mucho. Aprendizaje significa para mí (por si interese a alguien) que el poema sirve como un poderoso estímulo para seguir creando; para decirlo con más claridad: sirve como fuente de inspiración, y creo que esto debería ser siempre una de las características de un buen poema. Que abra el apetito de la creación. Albricias.

Saludos desde el sur, donde hoy amaneció fresco.
Óscar

Muchas gracias, Óscar, en verdad es todo un lujo y un honor tu comentario. A estas alturas pienso que las clasificaciones estilísticas de la poesía son inútiles e innecesarias. A mi modo de ver este es un poema realista que se "ayuda" de alguna metáfora y sigue cierta lírica "suave"en su fondo visual y argumental. Y es que yo creo que simplemente hay poemas más o menos inspirados y logrados, no más. Y por supuesto, la inspiración es contagiosa, sobre todo cuando nos sorprende de alguna manera y nos toca alguna pequeña fibra sensible que en algún momento permanecía "hibernada" o "somnolienta". Un fuerte abrazo, compañero.