Francisco López Delgado escribió:Hallie, tu poema es precioso y tu forma de escribir diferente. Con cada verso provocas una reflexión y trazas, al mismo tiempo, una idea que a veces es difícil de entender. Te felicito. Abrazos.
Francisco, amigo, muchas gracias por la amabilidad de tu reflejo. Comprendo perfectamente lo que dices acerca de la idea que puede ser difícil de entender.
Este intento quiso ser una suerte de plegaria, de pedido. A la vez, contiene sentencias que pueden percibirse como sanadoras, correctoras, y hasta felices (apoyadas en las teorías de mundos simultáneos o alternativos que son suceptibles de alteración por el hecho de sucederse en dimensiones de frecuencia más alta). La idea se basa en ese ojo superior, ese Dios simbólico que llevamos en nuestro fuero interno. De ahí que aparezca un iris que recibe un recuento de visiones, una esclerótica que anula la sombra, un nervio que podría ser óptico y colecta todas las voces del deseo (s) expresado (s) . El ojo de pez es una técnica fotográfica con la cual se pueden captar ángulos muy grandes, de 180 grados o más, con una visión distorsionada deliberadamente. El resultado se asemeja a una imagen reflejada en una esfera. Los humanos, inmersos en nuestra subjetividad, tendemos a ajustar la verdad o la realidad a nuestras expectativas o a nuestros corrientes de pensamiento.
Espero haberte dado un poco de luz al posible camino que sigue el poemilla.
Abrazo grande y mil gracias por tu valiosa huella.