Editorial Alaire

Gracias, Nancy, por el bello comentario y por el abrazo que te correspondo.
Un abrazo.
Pepa

Gracias, ERA, por acercarte y dejar tu hermosa huella. Los moldes están para hacer pasteles o romperlos.
Un abrazo.
Pepa

Yo creo que has escogido el camino perfecto para ser feliz. Muy bueno el poema como todos los tuyos. Un abrazo.

Aún te queda carne y huesos para decir lo que has dicho, querida amiga Pepa. Eres grande, no hablo del tamaño que desconozco , hablo de la poeta que me hace sentir y pensar en cuantas cosas que ahora me llevan de camino, talvez a otro amanecer....
Un abrazo fuerte, desde mi isla.

José Manuel F. Febles

Qué bien dices y qué gustazo leerte siempre. El final es perfecto, no estaría mal recordarlo de vez en cuando.
Te mando un abrazo

Gracias, Rafel, por la patada hacia arriba. Siempre es un placer saberte por ahí.
Un abrazo.
Pepa

Gracias, Alejandro, por el comentario amable y la empatía. Creo que los finales de los cuentos son felices porque no son finales, pero por pedir que no quede.
Un abrazo.
Pepa

Gracias, Victor, por tu generosidad y cercanía. Lo del latín se me da fatal y tengo demasiado vértigo para lo del vuelo o subirme a un pedestal. A lo de las risas, el vinillo y la amistad, sí que me apunto.
Un abrazo.
Pepa

Sabes que adoro los poemas que no dan vueltas retóricas. Poemas que tienen pies y cabezas. Poemas que logran cerrar el círculo de concordancia semántica. Poemas, como este tuyo, que buscan la esencia del verso en la riqueza de la propia vida. Porque la poesía no es solamente sentimiento y emoción, sino una experiencia, una irrupción a una nueva realidad basada en nuestra propia experiencia.
En cuanto a la estructura formal, tú bien sabes que en poesía no sólo interviene el fondo, sino la forma, y no sólo la forma, sino el fondo. Esa complementariedad se da, en tu poema, de una manera tan armoniosa que parece natural. Te aplaudo.

Un abrazo, querida amiga.
Óscar

Tenemos aquí ese perfil iconoclasta que nos has mostrado otras veces y en el que mueves con un desparpajo asombroso. Encantado, Pepa, de asomarme a esta ruptura de tópicos que tan bien conduces para llevarnos a esa mujer real que sueña con ser feliz todos los días apartando los sueños que no le pertenecen.

Un abrazo.

Es un interesante juego entre pensamientos y reflexiones.Olvidar el ideal es no pensar en el futuro para crear la ilusión a través del presente. Ahora podríamos cuestionar si alzar la vista sobre el camino y construir con la imaginación un puente hasta lo todavía oscuro es derrochar la vida en esperanzas a veces vanas.
Si tomamos otra perspectiva es posible inquirirnos si es el ser humano un soñador que cree en las emociones, y al hacerlo estas lo conducen a ver más allá del horizonte. Entonces soñamos sin límites ni prejuicios, para escapar de la realidad solo por un momento.
No ser ángel, permite la felicidad que a su vez nos regala en la vida la razón de seguir dando pasos.
Un abrazo y un beso,
Juan Cruz.

Gracias, Ferreiriño, a la vuelta de ese feliz encuentro, por las palabras que dejas entre estos versos.
Un abrazo.
Pepa

Gracias, Ana, por tu acercamiento generoso a estas letras.
Un abrazo.
Pepa

Gracias, Jorge, por venir y dejar un comentario amable.
Un abrazo.
Pepa

Gracias, Gonzalo, por tu visita a estas letras y la huella amable que aquí dejas.
Un abrazo.
Pepa