Nada traigo de estreno

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Manuel, por acercarte con un comentario amable a estas letras.
Un abrazo.
Pepa

[C.P. Fernández]

Muy bueno, Pepa, me ha gustado mucho.

Un abrazo.

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Jose Manuel, por tus generosas palabras que aprecio y por esa admiración que dices, que seguro no merezco ni la mitad que tu.
Un abrazo.
Pepa

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Bruno, por la valoración tan positiva que haces de estas letras y por la estrofa de El Último...
Un abrazo.
Pepa

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Hallie, por tu entusiasmo que anima hasta a las piedras. Un placer tu visita.
Un abrazo.
Pepa

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, F. Enrique, por venir a mis versos y encontrar en ellos algo de tu gusto.
Un abrazo.
Pepa

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Guillermo, por el hermoso comentario que es casi un poema en si mismo, además de una muestra de tu gran generosidad.
Un abrazo.
Pepa

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Arturo, por pasearte por estos versos usados y contármelo.
Un abrazo.
Pepa

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Paola, por pasar y dejar tu amable comentario.
Un abrazo.
Pepa

[Josefa A. Sánchez]

Gracias,Isabel. Tu si que escribes requetebién y me encanta que me leas, pero más, leerte.
Un abrazo.
Pepa

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Julio, por el alto nivel que da tu presencia a mis versos. En cuanto a los tercetos, "la ignorancia es atrevida"- dicen.
Un abrazo.
Pepa

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Celia, por entretenerte en leerme y en contármelo.
Un abrazo.
Pepa

[Ventura Morón]

Querida Pepa, aparte de la belleza formal, hay en tus poemas una sensibilidad que emociona. Que bueno disfrutar de poemas como este, gracias por compartirlo.
Un beso grande

[Josefa A. Sánchez]

Gracias, Ventura (haciendo tiempo), por la generosidad que tuviste con estas letras y la que tienes siempre conmigo.
Un abrazo.
Pepa

[F. Enrique]

Muy bueno tu soneto, Pepa, mucho se puede decir de él y todo sería para loar las bondades de la autora. Ni los huesos escuetos que sostienen mi altura. Ni el síntoma evidente de mi grave locura. Ni el polvo del sendero que vengo levantando.