Me ha encantado la lectura de este encomiable, poema. Felicidades.F. Enrique escribió:A esa pena no he podido acostumbrarme
(Friedrich Hölderlin)
El resplandor mortecino que abriga
una corona de espinas ensangrentada,
el despertar de barro y tartanas
que obstruyen la calzada
de nuestras aventuras cuando vivir era sueño,
y el abandono
se ajustan a la frente de mi barrio
mordida por las olas y el salitre
que inunda la Playilla y empapa su pobreza
donde duermen los barcos varados para siempre,
y arrastra esta ausencia de niños que caminen,
la cartera a la espalda,
peinados, somnolientos,
los adioses de ortigas y cardos en la Vía
y los geranios blancos que escuchan los requiebros
de amantes solitarios que lloran bajo la luna.
El ahogado quejido resuelto en la llamada
de antiguas soledades, de héroes sin rostro
entre sábanas azules que anuncian la salida
del viejo pescador que murió una noche triste ,
y no puede zarpar con él mi alma que sufre dulcemente
porque está aquí en mi playa y en los muelles destrozados,
en los besos sin nombre, en canciones que suenan
y se mecen en la arena de mis primeros juegos,
en sirenas sin pudor que sonríen en la orilla
y te enamoran...
¡Qué lejos estás ahora que te siento perdido
y no me llamas!
¿Qué sombra se ha llevado mi sonrisa en el viento?
(Momentos, 6 ó 7)
Un abrazo.
BEGOÑA.