Editorial Alaire

Un soneto muy hermoso, amigo Mario. Encabalgamientos estróficos bien construidos y metáforas procedentes en un todo literario que logra juntar palabras muy bellas para ofrecernos una obra intemporal, digna de recitarse al comienzo de cada estío.
Ha sido un placer leerte. Felicidades por el poema.
Un cordial abrazo.

Gracias Javier.
Me alegra que te haya gustado el soneto, amigo mío. Un abrazo.
Mario.

Gracias Marisa.
Siempre es un placer tenerte en mis versos. Un abrazo, amiga mía.
Mario.

Otra muestra de tu maestría en el oficio de los sonetos. A destacar esos maravillosos encabalgamientos.

Un fuerte abrazo.

Mario, qué lindo poema, un disfrute. Mi felicitación.

Gracias Just, por estar en mis versos y comentarme, me alegra que te gustase. Un abrazo.
Mario.

Gracias María Pilar.
Me alegra saber que te ha gustado. Un abrazo Ebro abajo.
Mario.

Mario Martínez escribió:Del poemario "Nido de sonetos"


Allá por Junio


Amanecía. De tórrido zarpazo,
en viva y clara muestra de intenciones,
el Sol prendía fuego a los rincones
del día por llegar. En el regazo

de sombras sin usar, algún retazo
de primavera oyendo extremaunciones
y en el volar del aire migraciones
de tomillo y romero. Un embarazo

de luz en la campiña que agostada
con fe de rogativa desahuciada
suplicaba a la lluvia su regreso.

Y ajeno al estertor del seco río
bebía el Sol el mísero rocío
y daba calma al viento con su beso.




Mario.

Un sensorial poema que he disfrutado de su lectura. Te felicito.
Un abrazo.
BEGOÑA.

Gracias Rafel, por dejarme tu amable y halagador comentario, saber que siempre es un placer encontrarte en mis versos. Un abrazo, compañero.
Mario.

Gracias J. J. por estar ahí. Un abrazo, compañero.
Mario.

Excelente soneto. Un placer leerte, Mario.

Gracias Margarita, me alegra saber que te gustó, amiga mía. Un abrazo.
Mario.

Gracias Begoña, por estar aquí y decírmelo. Un abrazo.
Mario.

Mario Martínez escribió:Del poemario "Nido de sonetos"


Allá por Junio


Amanecía. De tórrido zarpazo,
en viva y clara muestra de intenciones,
el Sol prendía fuego a los rincones
del día por llegar. En el regazo

de sombras sin usar, algún retazo
de primavera oyendo extremaunciones
y en el volar del aire migraciones
de tomillo y romero. Un embarazo

de luz en la campiña que agostada
con fe de rogativa desahuciada
suplicaba a la lluvia su regreso.

Y ajeno al estertor del seco río
bebía el Sol el mísero rocío
y daba calma al viento con su beso.





Mario.

Has detallado en verdad en este poema estacional Mario,
muchos elementos naturales
Tienes una maestría en este estilo que envidio,
Me gustó muchísimo..

Abrazos de hermano

lázaro.

Gracias Hernan, me alegra saber que te gustó, amigo mío. Un abrazo.
Mario.