Playa del silencio (L.V)

[Isabel Moncayo]

Muy bonito tu poema, me ha encantado, Isabel.
Mis saludos.

Gracias, Rubén. He visto que no publicas poemas, sólo comentas, gracias por detenerte en los míos y dejar tu huella, un abrazo.

[Isabel Moncayo]

Hermoso poema, amiga Isabel, trufado de imágenes deliciosas, vocablos muy sugerentes y dimensiones sensoriales más allá del mundo vegetal que las adorna.
Ha sido un placer leerte. Felicidades.
Un cordial abrazo.

Es todo un placer saber que así lo perdibes, Rafel. Gracias por detenerte en mis versos y dejar tu amable palabra, un abrazo.

[Isabel Moncayo]

Ya te lo han dicho los compañeros, y yo lo comparto. Un poema de intenso lirismo e intensas emociones, construido mediante un lenguaje selecto y unas imágenes que transportan a los sentidos del lector.

Abrazos.

Gracias, Juan, todo un placer compartir poesía con todos vosotro/as, con mensajes alentadores que animan a seguir en este mundo poético, un abrazo.

[Isabel Moncayo]

Una delicia de poema, y aunque conocía las palabras que has incluido en tu excelente poema, también para más seguridad, he tirado del diccionario, pero no me había equivocado. Te felicito por la suavidad poética con que has plasmado tu forma de envejecer.

Un sincero abrazo hasta Asturias, que conozco algo.

José Manuel F. Febles

Me agrada enormemente saber que te ha gustado mi poema, José Manuel, gracias por dejar tu huella, un abrazo, desde mi cantábrico.

[Isabel Moncayo]

Precioso poema, Isabel, de los que levantan el ánimo para todo el día.
Un abrazo, compañera.
Mario.

Gracias, Mario, es bueno saber que mi poema, de algulna forma, es un estimulante, jeje, un abrazo grande.

[Isabel Moncayo]

Isabel, cuanto más leo tu poema, más me gusta. Felicitaciones, por tanta belleza.

Pues gracias, Hernán, por hacérmelo saber, un abrazo.

[Isabel Moncayo]

Un gusto leer tan hermosos poema. Algunas palabras que desconocía también me han encantado.
Un saludo, Isabel.

Gracias, Miguel, por dejar tu amable huella en mi playa del silencio, un abrazo.

[Isabel Moncayo]

Y extraño,
que no vengas a robarme el brillo de los ojos
cuando tu voz acallas por un tiempo
en el que yo envejezco entre agapantos.


Lo leí cuando recién se publicó, luego en otras dos o tres ocasiones Isabel. Y este domingo al fin con tiempo, puedo dejar mi huella en este poema amoroso,perfume fresco y sonoro. Es una barbaridad, claro que sí.

Abrazos con admiración.

Admiración compartida, Just, gracias siempre por venir con tu palabra cálida y alentadora, otro abrazo para ti.

[E. R. Aristy]

No me apacigüéis,
dejad que sus ojos de bardo
aquieten el sol que templa mi estanque,
que hoy están volando prófugas las mariposas
del fogaje intenso que expelen los eucaliptos.


Te busco,
en un tejado empapado de lluvia,
en la mueca intrépida de las ánforas,
en los acantilados norteños con tormentas.


-Anocheces, paisaje de silencio-


Me embobo, cierto,
de tus poemas de membrillo (con pan y queso)
y quisiera desafiarte a buscar lechetreznas
mientras recitas verdades a medias
o rumias metáforas caprichosas.


Y extraño,
que no vengas a robarme el brillo de los ojos
cuando tu voz acallas por un tiempo
en el que yo envejezco entre agapantos.

*

Me alegra encontrar este sutil poema donde la belleza reside en la cotidianeidad y la tristeza es una playa vacia y silente. Porque la alegria son todas esas gentes molestosas con las que tanto amamos compartir....un gran placer leerte Isabel.

Abrazos,
ERA

[lazaro Habana]

No me apacigüéis,
dejad que sus ojos de bardo
aquieten el sol que templa mi estanque,
que hoy están volando prófugas las mariposas
del fogaje intenso que expelen los eucaliptos.


Te busco,
en un tejado empapado de lluvia,
en la mueca intrépida de las ánforas,
en los acantilados norteños con tormentas.


-Anocheces, paisaje de silencio-


Me embobo, cierto,
de tus poemas de membrillo (con pan y queso)
y quisiera desafiarte a buscar lechetreznas
mientras recitas verdades a medias
o rumias metáforas caprichosas.


Y extraño,
que no vengas a robarme el brillo de los ojos
cuando tu voz acallas por un tiempo
en el que yo envejezco entre agapantos.

*

Precioso tu poema Isabel.Tiene la delicadeza de ser para otro, tan necesario a veces
cuando se toma como referencia.Leo la unidad, es mi percepción interna de analizarlo todo como un todo, quizás mi formación científica extendida a las letras...
Sensible, tierno, natural..me ha llegado

abrazos navideños

lázaro

[Isabel Moncayo]

No me apacigüéis,
dejad que sus ojos de bardo
aquieten el sol que templa mi estanque,
que hoy están volando prófugas las mariposas
del fogaje intenso que expelen los eucaliptos.


Te busco,
en un tejado empapado de lluvia,
en la mueca intrépida de las ánforas,
en los acantilados norteños con tormentas.


-Anocheces, paisaje de silencio-


Me embobo, cierto,
de tus poemas de membrillo (con pan y queso)
y quisiera desafiarte a buscar lechetreznas
mientras recitas verdades a medias
o rumias metáforas caprichosas.


Y extraño,
que no vengas a robarme el brillo de los ojos
cuando tu voz acallas por un tiempo
en el que yo envejezco entre agapantos.

*

Un poema bellísimo, de una delicadeza exquisita... como si jugaras mientras cantas una cancioncilla.
Muchas gracias por las sensaciones que provocas con estos versos.

Un abrazo grande amiga mía.

Gracias a ti querida Pilar, por dejar constancia de tu inestimable huella y qué bueno saber que te gustó, un beso.

[Isabel Moncayo]

Isabel, tu poema es un deleite para los sentidos. Mi felicitación con un saludo.

Gracias, Alberto, me alegra saber que te ha gustado esta playa de silencios, un abrazo.