Editorial Alaire

Una herida; el clamor de una llama luminosa donde se oculta un latido sensualmente poético.


Gusto leerte, compañera

Ignacio Fajardo escribió:Como siempre ocurre en tus poemas, lo dejas abierto a múltiples interpretaciones y, como siempre, a mi me viene una muy fuerte. Como nace de muy adentro y luego viene, me la reservo dormida entre los labios.

Un beso con cariño.

Al final nunca me lo cuentas, Ignacio, me resignaré a eso pero me alegra igualmente verte por aquí. Muchas gracias por leerme.

Un beso,

Carmen

Me gusta la idea de refugio como una suerte de proteger, de dejarse habitar por un otro. Todo el poema es realmente hermoso y de un tratamiento tan sutil que uno se concientiza de que lee algo que no está contaminado por elementos que sobran.

Subrayo este verso, porque sí:
"Para beber la infancia que te nace en el vientre"


Abrazos, Carmen.


Martín Desormeaux.-

Me ha gustado mucho.
Es un poema inteligente y bello.
Ya sabes como disfruto y me inspiro leyéndote. (Creo que ya te lo he dicho alguna vez)
Como siempre felicidades y un fuerte abrazo
Joan

Mario Martínez escribió:Hola Carmen

Convertirse en refugio de alguien o de algo es una hermosa aspiración, amiga mía. El poema en tu línea de siempre, derrochando poesía.
Abrazos.
Mario.

Gracias, Mario. Eres siempre pura generosidad.

Un abrazo,

Carmen

Marina Centeno escribió:"Convertirme en refugio...para ser sólo herida llaga en mitad del tallo"

Ser refugio y a la vez herida. Ser herida y ser llaga. Ser cicatriz y permanecer intacta sobre la piel. Nítida y honda. Me gustó, mucho me gustó tu poema, Carmen.

Saludos y abrazos.

Me alegra mucho que te gustara, Marina. Y agradezco enormemente tu lectura.

Un abrazo grande,

Carmen

Alondra Santoni escribió:Imágenes fuertes pero hermosas y el título dice todo


Me gusta tu foto nueva



Un abrazo, carmen

Me alegra que te gustara, Alondra.

Un abrazo,

Carmen

Fermín Lasarte escribió:Hermoso Carmen. Bellísimas imágenes, muy originales y un final a toda orquesta, con tu cuota de sal tan propia, ta tuya. Me ha encantado Carmen, te felicito.
un abrazo grande.

Gracias, Fermín, me alegra si te gustó. Y sí, la sal es que mira que me gusta, si me la prohibieran me dejarían sin comer, jajaja...

Te mando un abrazo,

Carmen

Julio González Alonso escribió:Intenso poema, Carmen. Pero lo que más me ha gustado es el ritmo de que está impreso cada verso y esa musicalidad que le acompaña al poema eligiendo las palabras más adecuadas con la carga semántica necesaria, sin estridencias y sin vacíos. Un gran poema.
Salud.

Gracias, Julio, me alegra que aprecies el ritmo porque durante mucho tiempo fue mi asignatura pendiente y, la verdad, es que siempre intento trabajarlo lo mejor que puedo.

Salud y abrazos para ti,

Carmen

Nésthor Olalla escribió:Una herida; el clamor de una llama luminosa donde se oculta un latido sensualmente poético.


Gusto leerte, compañera

El gusto es mío, Nésthor. Muchas gracias por tu lectura.

Un abrazo,

Carmen

Martín Desormeaux escribió:Me gusta la idea de refugio como una suerte de proteger, de dejarse habitar por un otro. Todo el poema es realmente hermoso y de un tratamiento tan sutil que uno se concientiza de que lee algo que no está contaminado por elementos que sobran.

Subrayo este verso, porque sí:
"Para beber la infancia que te nace en el vientre"


Abrazos, Carmen.


Martín Desormeaux.-

Esa es la idea, aunque sólo se puede ser refugio con el permiso de un otro...

Te dejo un beso,

Carmen

Tristany Joan Gaspar escribió:Me ha gustado mucho.
Es un poema inteligente y bello.
Ya sabes como disfruto y me inspiro leyéndote. (Creo que ya te lo he dicho alguna vez)
Como siempre felicidades y un fuerte abrazo
Joan

Siempre tan generoso, Joan... Muchas gracias por andar en esta lectura.

Abrazo grande,

Carmen