Luis Oroz escribió:Impresionante poema, Jerónimo.
Se clava en tus versos esa necesidad vital de comunicarnos, toda esa fuerza que estalla entre las manos, entre los dientes, como un volcan de sentimientos igneos.
Y no poder jamás decir te amo,
miradas extasiadas, miradas infinitas,
palabras enterradas en densos cementerios,
y sangre, manantiales de sangre apasionada,
que bulle, que palpita y rompe y brota
e invade las estancias del pálido recuerdo
como al terrible mar lo invade un alba.
Ya sabes que siento debilidad por la palabra que lleva una emoción palpable, por la voz capaz de derramar algo de sí, bajo la capa, muchas veces impermeable, de la gramática.
Fantástico poema, con toda sinceridad.
Un abrazo, monstruo.
Luis Oroz.
Esto no se hace, Luis. Intento, intento contestarte, pero no puedo: los pies se me hunden en ese mar dulce de tus elogios, tan vestidos con tu amistad. Sé que eres sincero, y eso es lo peor. Me abruma la responsabilidad de mantener el listón de mi posía al nivel que tú lo elevas. Sólo soy un viejo adicto a la poesía que, de tanto llevar el cántaro a la fuente, alguna vez lo rompe.
Gracias, querido amigo. No lo sé decir de una forma más entrañable.
Un abrazo.