Editorial Alaire

Óscar Bartolomé Poy escribió:

Pilar Morte escribió:¿Cómo arrancar la hierba y velar el árbol,
abrigar las raíces del frío del miedo,
y proteger las ramas, la señal de su fruto?

Volver, como vuelve el marino en su afán,
su corazón mojado, cautivo por la fe,
seducido por la razón de los fondos
y las algas sin nombre.

Anduve un tiempo tras el mar inmortal,
inventada en luces por sus faros,
y el alma sin contar las horas muertas.
(cuando las manos cercaban acantilados
y la luna mostraba una playa sin límites).
Idealicé la infinitud del misterio,
la utopía nadando sin descanso,
y el horizonte por encima de los ojos.

Más tarde advertí el mar indescifrable
y mis cuencas ahogadas por sus aguas.
Vi que no hace río el manantial tapiado,
que mirar sin andar no atraviesa senda,
y que, solo seguir el trayecto, interpreta los pasos.

Un poema repleto de aciertos. Es el mejor o uno de los mejores que te he leído. Me he puesto a subrayar, y casi lo subrayo todo. Me han gustado mucho esas imágenes marinas y esa travesía con final incierto.

Saludos, amiga Pilar.

juan delgado escribió:Tu poema anima a no quedarse quieto y andar implicándonos de manera activa en la realidad. Al menos, ese valor tan positivo me transmite. Enhorabuena Pilar
Un saludo.

Juan

Ricardo Serna G escribió:Pilar Morte,

Magnífico poema
imagen y verso se unen en su belleza


un abrazo fuerte, querida amiga

Marian Ramentol Serratosa escribió:caminar conlleva siempre un riesgo, pero es el único modo de dotarnos de alas, el poema encierra toda una filosofía y se deja caer, suave, sobre las retinas del lector.

Me ha encantado

Un abrazo
Marian

Carmen Alegre escribió:y no parar hasta interpretar todo lo interpretable.

Genial Pilar.

Un placer.

Antonio Justel escribió:

Pilar Morte escribió:¿Cómo arrancar la hierba y velar el árbol,
abrigar las raíces del frío del miedo,
y proteger las ramas, la señal de su fruto?

Volver, como vuelve el marino en su afán,
su corazón mojado, cautivo por la fe,
seducido por la razón de los fondos
y las algas sin nombre.

Anduve un tiempo tras el mar inmortal,
inventada en luces por sus faros,
y el alma sin contar las horas muertas.
(cuando las manos cercaban acantilados
y la luna mostraba una playa sin límites).
Idealicé la infinitud del misterio,
la utopía nadando sin descanso,
y el horizonte por encima de los ojos.

Más tarde advertí el mar indescifrable
y mis cuencas ahogadas por sus aguas.
Vi que no hace río el manantial tapiado,
que mirar sin andar no atraviesa senda,
y que, solo seguir el trayecto, interpreta los pasos.

... Pilar, es un estupendo poema, pero sobre todo, sobre todo, la última parte o estrofa; toda ella es muy buena y versos de altísima estirpe, amiga; un abrazo, Orión

Sara Castelar Lorca escribió:Pilar, tus versos son hondura que se va perfilando en símbolos. Vas sumergiéndonos en el interior casi de forma imperceptible, con toda la suevidad de una pluma cuidada y el corazón de una mujer que mira al mundo con los ojos de la no indiferencia. Hay muchos versos memorables aquí, aciertos que componen un conjunto muy equilibrado, tanto en fondo como en forma. Además nos llevas a una conclusión que no deja escapar, que te atrapa de forma irremediable.
Con toda sinceridad, creo que de todos los poetas que sigo por este lugar, tú eres de las que más ha crecido, ahora sólo hay que seguir volando, Pilar, la poesía ya ha cedido en tus dedos porque en tu corazón seguramente ha estado siempre.

Un abrazo

Sara

Sandra Ignaccolo escribió:Pilar, me sumergiste en la profundidad de tus versos dejando tu inmaculado halo de belleza, felicitaciones amiga.

Fermín Lasarte escribió:Un gran poema Pilar. Me ha encantado, principalemnte la tercera estrofa, es brillante, crea un clima único, placentero, misterioso, genial sin dudas.
Ha sido un gusto Pilar, un abrazo grande.

LEMOINE Y BOSSHARDT Jorge escribió:Incuestionables versos magníficos. Felicitaciones.