Editorial Alaire

desgarrado texto
con una severa abnegación hacia uno mismo

"¿Cómo puedo vivir?
Dejádme un hueco en la tragedia,
y me devoraré como a mis propios hijos"


ha sido un gusto querida amiga


recibe un abrazo

.

Circunvoluciones centríptas del pensamiento, que engrandecen este trágico bostezo que es ser.
Saludos.

¿Cómo puedo vivir?
Dejádme un hueco en la tragedia,
y me devoraré como a mis propios hijos.
Me negaré.
Ejemplificaré la Nada
como proyectil alado del pensamiento
ajeno y severo del comienzo
sin palabra.

Conmovedora, Amparo: Dejádme un hueco en la tragedia (no desentonaré), me devoraré como a mis propios hijos. Me negaré (...)

Conmovedora estrofa, y bella, para mi gusto al menos.

Blanca

Amparo Guillem,
En tu poema muestras al hombre desnudo en su insignificancia cuando caen sobre él las luces del escenario de esa gran tragedia que es la vida. La memoria mitifica y mistifica, pues rara vez los recuerdos son como recordamos que fueron; les añadimos un pátina dulce para que luzcan más que el presente, cambiante, y que el futuro, incierto. Oportunas citas mitológicas, y dos expresiones fetén: "divagaciones homuncularmente muertas" y "proyectil alado del pensamiento".

Saludos, Amparo.

La verdad es que negarse sobre todo y ante todo es necesario para olvidar mirar mi ombligo.
Saludos.
Amparo

Amparo Guillem,
Magnífico poema, querida amiga

me quedo un rato
a disfrutarlo plenamente

Un abrazo fuerte

Amparo un poema muy bueno, de los que relees y te dejan reflexionando...

Yo intento verle la cara optimista a este misterio que es la vida, no le encuentro un sentido más allá del que cada uno le quiera dar,pero ya que estamos ...

Me gustó leerte,un afectuoso saludo.

En efecto, nada de lo recordado es como fue: cuando decimos "hacer memoria" es eso, fabricar la mamoria con los materiales del corazón, porque "recordar" es volver al corazón.
Saludos.
Amparo

Para eso están los poemas que nos gustan, para detenernos en ellos y saborearlos.
Saludos.
Amparo