Editorial Alaire

Todo poeta en otoño es el mas extranjero de los seres humanos, es en definitiva una inconclusa realidad del atardecer. un placer pasar por tu otoño.
javier

Pues ya es otoño. Maravillosa estación. Es mi favorita junto al invierno, odio el calor.
Me gusta la transición verano a otoño.

Todo es bueno en otoño, incluso sus rimas: hojas secas, carrabouzos (bugallos o cocas). El color. La ropa de abrigo. Las castañas.

Un saludo.

Hola Enrique.
Me ha gustado tu poema.
Casi veo las hojas marrones, amarillas y rojas que se van desprendiendo se los árboles y forman esa alfombra en la que me gustaría volar, ser Aladina.
Un abrazo poeta.

Antonio: una agradabilísima sorpresa tu presencia en este poema. Me alegra mucho que esos últimos versos calaran en tu sensibilidad y volaras conmigo más allá. Muchas gracias, poeta. Recibe mi agradecimiento y un cordial saludo.

Alonso: desde la terreta… En ocasiones lo exterior nos hace mirar en el interior y las estaciones son preludios de fríos de muy distinta naturaleza. Gracias por pasar por aquí. Un fuerte abrazo.

Javier: extranjeros, sí, porque, en realidad, nada poseemos y, al marcharnos, nada nos llevaremos con nosotros. Gracias por el comentario. Un cordial saludo.

Antonia: a mí, en esta tierra que me habita, el otoño también me parece una estación magnífica… Casi todo es bueno en ella. Gracias por tu comentario. Un cordial saludo.

Carmen: gracias por soñar cuentos de vuelos sobre alfombras conmigo. Otro abrazo fuerte para ti.

enrique sanmol escribió: ↑Lun, 07 Oct 2024 16:16
Gesange, Op. 7 No. 5. Die Trauernde – J. Brahms, Juliane Base

Ya es otoño.

Surcan el aire sonidos de atascos,
gentío y cláxones.

La antorcha se atenúa,
los pájaros emprenden su vuelo migratorio
y regresan las buenas intenciones.

También regresa el tedio,
la sucesión de jornadas sin luz,
los días monocromos, la rutina.

Desde el otro lado del mundo
oigo voces que parecen renegar
del comienzo del calor.

Allí arranca ahora la primavera
y un autor, seguramente, querrá
explorar dolores más insondables.

Aquí, en este comienzo de estación,
los árboles inician su decadencia
amarilla y roja,
regalan su desnudo al viento.

Se diría que de tanto cambiar
todo parece haberse ido.

Ya es otoño,

y tú regresas, una vez más, lejos de ti
y de los días cálidos,
a la contemplación.

Te preguntas qué nos traerá
este aire tembloroso.

Te dices que precisas olvidar.

Te repites que no quieres volver
a los muelles donde tantos partieron
dejándonos aquí, abandonados,

esperando la llegada del frío.

Te agradezco sinceramente que hayas pensado en mí en este magnífico poema que me recuerda a algunas composiciones del primer Paul Simon.

Gran canción esta de Paul Simón, de sus magníficos comienzos, que me traes.

Gracias y un fuerte abrazo.

Qué bien se llevan ese pasaje de Brahms y esos versos, limpios, despejados de todo ripio posible.
F. Enrique debe estar disfrutándolos todavía.
Mi fraterno abrazo a los dos Enriques.

Lisandro

PD: Aquí comenzó el invierno