Sub-jectum

[Hallie Hernández Alfaro]

Una abraçada enorme, estimadíssim amic.

[Pilar Morte]

Me alegra ver reconocido tu poema. Enhorabuena, lo merece, querido amigo.
Un abrazo grande

[Marisa Peral]

Merecido reconocimiento, Julio, enhorabuena.

Un abrazo.

[Ramón Carballal]

Mi felicitación por la merecida distinción a tu poema. Un saludo.

[Ricardo López Castro]

El poeta debe ser un cómputo de cosas.
Humildad y versos abanderan este escrito.
Eres uno con tu voz.
Mis más sinceras felicitaciones.
Abrazos y felicidad.

[Raul Muñoz]

Mi enhorabuena, Julio, por el merecido reconocimiento. Un poema hermoso en su mirada abierta a descubrir.

Un abrazo.

[E. R. Aristy]

Un abrazo, Julio. Es una bella ocasión en la poesía, tu poesía!

[Alejandro Costa]

Mi más sincera enhorabuena.

Un fuerte abrazo, compañero.

Salud, paz y felicidad.

[J. J. Martínez Ferreiro]

NORABOA por este merecido reconocimiento a tan magnífico poema.

Todo un placer de lectura, amigo Julio.

Un abrazo.

[Óscar Distéfano]

Un poema que ha removido mi visión poética; es de los que siempre espero. Me ha gustado tanto que me he ido a buscar el significado de las palabras que no conocía, para tener mayor panorama. La descripción del sujeto humano, perdido en el laberinto vida, es admirable. El despertar de la conciencia, a partir del simbolismo de la mirada, es una carga poética trascendente.
Has filosofado con versos de altura, compañero poeta. Enhorabuena.

Felicito al jurado por su acierto, y a ti por recibir tan justo premio.

Un abrazo grande.
Óscar

[jose manuel saiz]

Mi enhorabuena Julio por el galardón, merecido, a tu poema.
Un abrazo.
J. manuel

[Javier Dicenzo]

Interesante reflexiòn, lo tomo como un callage de virtudes literarias, felicitaciones por el galardòn.
Javier

[Ana Muela Sopeña]

Felicitaciones por el reconocimiento, Julio:

El tema del poema es siempre candente.
La forma que has escogido: original.


Abrazos
Ana

[Hallie Hernández Alfaro]

Miramos sin ver o vemos
lo que queremos ver; mirar y ver
no son una función del hueso. Luego,
¿para qué son los ojos? Ah, ahí
hay un árbol torciéndose en el día,
un olivo, se muestra y da; ves
cómo en el desnudo siendo, es hermoso
su estar para que lo reciba en el vivir
lo humano. Hemos leído
a Lorca, ese niño idiota que por las piezas va
con muletas y golondrinas que hablan
y dicen amor, amor, cuándo se aherrojó
tu fuego. Hay cuadros que son nebulosas enormes
de destiempo, Turner o Klee. Hay deidad
en Delfos o en el románico expolio
de Taüll. ¿Qué leen los ojos, qué ven:
cromatismos o algo que el mirar embellece?
Cierto, urge el vaivén diario por el sinfín
de calle, trabajo, hogar, limpio, cocino y deudas.
Lo angustioso de saberse aquí,
casi proscrito, glauco en el horizonte al fondo.
El yo te quiero cuando tú no de tú y mí. Y el corre,
corre, no te detengas, aquí no respira Whitman.
Entretanto, se va la vida. Cuestión:
¿tuvimos los ojos lo bastante abiertos? ¿Vimos
a la muerte venir sin desconsolado adiós?
Algo, en este tan vasto como innecesario universo,
ha de tener sentido: ninguna ecuación diferencial
siente. Pero, se sabe, en el principio
fue dicho: hágase la luz; y abrimos los ojos.





[Nota bene: Quienes por algún acaso alcancen a leer el texto, que por anticipado me excusen: dejarlo aquí es casi un agravio para el participante habitual. Mi xeniteia no da para mucho más.]

Sube para deleite de todos.

[F. Enrique]

Intelectualidad y mensaje. Muy bueno.

Francisco Enrique León.