Valía un solo tictac

[J. J. Martínez Ferreiro]

"Desciendo de la cumbre con el sosiego del paso
y el recuerdo de los días de sol y frío
que goteaba en la niebla.
Evito el tropiezo con la lentitud del que conoce sus huesos,
dejo las grietas del mundo que no puedo llenar
y acojo lo que a mi camino llega"

Magnífica, la expresión poética de estos versos; una recapitulación de la experiencia de lo vivido, y apertura hacia lo nuevo.

Me recordó aquellos versos de Rimbaud en las Iluminaciones:
"Conocido suficiente. Los decretos de la vida.
─¡Oh Rumores y Visiones!
¡Partida a la afección y al ruido nuevos!"

Todo un placer de lectura, Pilariña.

Bicos e saúde.

[Pablo Ibáñez]

Pilar,

muy bello este poema, amiga. Me gusta el tono confesional, puro, la manera cómo haces balance de vida, desde una madurez de ecuanimidad valorativa, pero también desde la ternura del recuerdo, exento de rencor y de cuentas pendientes con el pasado. Ojalá pudiera yo llegar un día a esta calma de pensamiento.

Te mando un fuerte abrazo, querida amiga.

[Rafel Calle]

Más duro que el pedernal, más prolijo que una lupa, este poema existencial en grado sumo, muestra a una enemiga de todas las secuelas y casi en secuela convertida, ahora en el cristal del invierno, vaho que pena el microclima de un ecosistema sensorial acompasadamente suspendido.
Pero he aquí al huésped de la metáfora, escribiente y vital acompañante de los eternos aspirantes a fugitivos…, y dice que es más cierto el mañana que el ayer, mañana será lo que tu pienses que está siendo. Quizá se pueda cambiar el futuro, tal vez bastaría con soñar, pero el pasado, el pasado solo se puede cambiar mintiendo.
Ha sido un placer leerte, aunque haya sido en una discursiva tremendamente percutora, sobre todo, para todos aquellos que están en la edad de hacer balance..., el mío está que trina, las cuentas no salen o son paupérrimos los beneficios, mientras se acerca el cierre de la "empresa". Bueno, tú te lo tomas como una paz y eso siempre reconforta, siempre es mejor que tomárselo como la quiebra total de la "empresa".
Abrazos.

[Pilar Morte]

Gracias, queridos amigos, Ferreiro, Pablo y Rafel, por estar con vuestra valiosa palabra.
Abrazos
Pilar

[Ulises C.J.]

Que reminiscencia más hermosa, amiga. Mi corazón ha latido al ritmo de tu tic tac. Gracias.

[Pilar Morte]

Me alegra que te haya llegado el poema. Gracias por decírmelo, amigo
Abrazos

[E. R. Aristy]

En aquel tiempo de segundos vivos
todo era servible: un solo tictac,
el cristal de bohemia, la forja del herrero.

Los ojos advertían vida detrás de las reglas
protegidas por las sotanas, tocas y familia
-un frente riguroso que seguía mi huella
y retiraba los enseres de valijas nuevas-
La sangre gritaba por el cuerpo.
La luz se adaptaba al crepúsculo.
y festejaba la soledad blanca de los diarios.

A veces me hacía invisible
y a la libertad - que sabía de mis silencios-
le dibujaba alas y boca para el trino.

Cuando todos dormían,
el alma danzaba en exquisito canto
estimulando los engranajes que unían los afectos,
los sueños llenando el aire,
la música en mí.

Ya no importa lo que fui, el color con el que veía el mundo,
ni deseo hacer balance de luces y sombras.
Desciendo de la cumbre con el sosiego del paso
y el recuerdo de los días de sol y frío
que goteaba en la niebla.
Evito el tropiezo con la lentitud del que conoce sus huesos,
dejo las grietas del mundo que no puedo llenar
y acojo lo que a mi camino llega.

Mi alma ya cantó en versos la música celada
y sintió el aroma de lo no vencido,
el miedo y el dolor de la distancia,
el hombre cuando llora.
Todo lo entregué con poemas del alma,
y ahora siento como me retira la noche.
Conservo la palabra que guarda el diccionario de la vida,
la tierra
y el hermano que la habita.

El descenso será lento,
traigo agradecimiento y afecto
y borrones de tinta en los recuerdos
que dejaron heridas las canciones.
Pero todo camina a la paz,
la paz…

Un poema que celebra todos los tramos de la trayectoria personal de la vida. Hermoso viaje poético, Pilar, te felicito. Felices Pascuas.

[Pilar Morte]

En aquel tiempo de segundos vivos
todo era servible: un solo tictac,
el cristal de bohemia, la forja del herrero.

Los ojos advertían vida detrás de las reglas
protegidas por las sotanas, tocas y familia
-un frente riguroso que seguía mi huella
y retiraba los enseres de valijas nuevas-
La sangre gritaba por el cuerpo.
La luz se adaptaba al crepúsculo.
y festejaba la soledad blanca de los diarios.

A veces me hacía invisible
y a la libertad - que sabía de mis silencios-
le dibujaba alas y boca para el trino.

Cuando todos dormían,
el alma danzaba en exquisito canto
estimulando los engranajes que unían los afectos,
los sueños llenando el aire,
la música en mí.

Ya no importa lo que fui, el color con el que veía el mundo,
ni deseo hacer balance de luces y sombras.
Desciendo de la cumbre con el sosiego del paso
y el recuerdo de los días de sol y frío
que goteaba en la niebla.
Evito el tropiezo con la lentitud del que conoce sus huesos,
dejo las grietas del mundo que no puedo llenar
y acojo lo que a mi camino llega.

Mi alma ya cantó en versos la música celada
y sintió el aroma de lo no vencido,
el miedo y el dolor de la distancia,
el hombre cuando llora.
Todo lo entregué con poemas del alma,
y ahora siento como me retira la noche.
Conservo la palabra que guarda el diccionario de la vida,
la tierra
y el hermano que la habita.

El descenso será lento,
traigo agradecimiento y afecto
y borrones de tinta en los recuerdos
que dejaron heridas las canciones.
Pero todo camina a la paz,
la paz…

Un poema que celebra todos los tramos de la trayectoria personal de la vida. Hermoso viaje poético, Pilar, te felicito. Felices Pascuas.

Gracias, amiga, por dejar tu valiosa palabra.
Felices Pascuas para ti y los tuyos.
Abrazos
PIlar

[Ignacio Mincholed]

Pilar, qué bien lo aprendido camino a la paz:

Evito el tropiezo con la lentitud del que conoce sus huesos,
dejo las grietas del mundo que no puedo llenar
y acojo lo que a mi camino llega.

Un poema con mucho temple personal y poético. Felicidades.

Un abrazo.
Ignacio

[Pilar Morte]

Pilar, qué bien lo aprendido camino a la paz:

Evito el tropiezo con la lentitud del que conoce sus huesos,
dejo las grietas del mundo que no puedo llenar
y acojo lo que a mi camino llega.

Un poema con mucho temple personal y poético. Felicidades.

Un abrazo.
Ignacio

Recibo tus palabras con agrado. Gracias por estar, amigo.
Abrazis