Editorial Alaire

J. J. Martínez Ferreiro escribió:Bienvenido al foro, amigo Jorge. Espero que te sientas a gusto con nosotros.

Un interesante soneto, este que nos dejas.

Un abrazo.

Ana García escribió:Un soneto que te hace pensar en los dichosos celos. Mira que la lían parda la mayor parte de las veces.
Bienvenido.

Antonia Mauro escribió:Muy bueno.

Los celos son peores que el agujero de la capa de ozono.

Esos sí que pueden desequilibrar el ecosistema. Y no hablo de los celos en pareja que también, hablo de los otros, de esos destructivos y autodestructivos.

Esos que sienten algunas personas hacia todo lo que se mueve a su alrededor. Y destruyen todo: la amistad, un árbol, o su propia vida.

Saludos y bienvenido.

Ana Muela Sopeña escribió:Bienvenido al foro, Jorge:

Un gran soneto que aplaudo

Un fuerte abrazo
Espero que te encuentres a gusto entre nosotros
Ana

Jorge Busch escribió:Lo que quiere construye con indicios
usando como lente su deseo,
entregando a las olas del mareo
las verdades cual sucios desperdicios.

Hurgando por los mínimos resquicios
nutre su paranoico devaneo
donde transforma al inocente en reo
acusado de oscuros maleficios.

Apresada en la tela de su araña
poco ve más allá de sus narices
y de la niebla hedionda de su entraña.

Piedad merecerían sus deslices
si el odio no regase con su saña
confundiendo con zorros las perdices.

Jorge Busch escribió:Lo que quiere construye con indicios
usando como lente su deseo,
entregando a las olas del mareo
las verdades cual sucios desperdicios.

Hurgando por los mínimos resquicios
nutre su paranoico devaneo
donde transforma al inocente en reo
acusado de oscuros maleficios.

Apresada en la tela de su araña
poco ve más allá de sus narices
y de la niebla hedionda de su entraña.

Piedad merecerían sus deslices
si el odio no regase con su saña
confundiendo con zorros las perdices.

Manuel Rubio escribió:

Jorge Busch escribió:Lo que quiere construye con indicios
usando como lente su deseo,
entregando a las olas del mareo
las verdades cual sucios desperdicios.

Hurgando por los mínimos resquicios
nutre su paranoico devaneo
donde transforma al inocente en reo
acusado de oscuros maleficios.

Apresada en la tela de su araña
poco ve más allá de sus narices
y de la niebla hedionda de su entraña.

Piedad merecerían sus deslices
si el odio no regase con su saña
confundiendo con zorros las perdices.

Curiosa esta "enfermedad" Jorge, el que la padece no la sufre, y lo peor es que no hay tratamiento. ¿Qué te digo sobre esto que no sepas?

Tu soneto...impecable como siempre.

Recibe un abrazo, y vamos por otro.

Rafel Calle escribió:Bienvenido, amigo Jorge, es un placer tenerte entre nosotros.
Te presentas con un hermoso e interesante trabajo.
Saludos cordiales.

Hallie Hernández Alfaro escribió:

Jorge Busch escribió:Lo que quiere construye con indicios
usando como lente su deseo,
entregando a las olas del mareo
las verdades cual sucios desperdicios.

Hurgando por los mínimos resquicios
nutre su paranoico devaneo
donde transforma al inocente en reo
acusado de oscuros maleficios.

Apresada en la tela de su araña
poco ve más allá de sus narices
y de la niebla hedionda de su entraña.

Piedad merecerían sus deslices
si el odio no regase con su saña
confundiendo con zorros las perdices.

Me ha gustado mucho, Jorge; ese festín amargo, esa dolencia estruendosa en la dignidad...

Un abrazo y gracias por compartir.

Pablo Ibáñez escribió:Jorge,

no es nada fácil escribir un soneto bien cuadrado, bien dispuesto y que exprese eficazmente una idea. Este cumple con creces todos esos requisitos. A mí me ha gustado mucho.

Bienvenido a Alaire.